El invierno en Latinoamérica ha dejado al menos 225 muertos y miles de personas afectadas, debido a la ola de frío que se extiende por el Cono Sur y a la onda tropical que atraviesa varios países de Centroamérica, el Caribe y el norte de Sudamérica. Las malas condiciones climáticas en el continente han obligado a varios gobiernos a declarar alertas de emergencia y a tomar medidas como la suspensión de clases en Bolivia, Paraguay y Argentina, así como la evacuación de los afectados hacia albergues o refugios temporales.

El mayor número de víctimas mortales por la ola de frío en el Cono Sur se registró en Bolivia, con 25 personas fallecidas, en su mayoría indigentes que fallecieron por hipotermia en las últimas semanas en cuatro de las nueve regiones, y dos víctimas intoxicadas por inhalar monóxido de carbono, en la región de Tarija (sur).

El Gobierno de Evo Morales advirtió de que las bajas temperaturas también mermarán la producción agrícola.

En Paraguay se han conocido en la última semana a causa del frío un total de doce víctimas mortales y más de un centenar de damnificados en albergues, principalmente indigentes, además del deceso de dos mil cabezas de ganado vacuno.

Según advirtió la Dirección de Meteorología, el frente frío, con temperaturas bajo cero en algunas regiones del país y con lloviznas, se mantendrá y no se registrarán temperaturas mayores a los 17 grados durante esta semana.

En Argentina, el número de decesos por hipotermia llegó a once, luego de que el domingo pasado se registrara la muerte de un bebé y un anciano en la ciudad de La Rioja (noroeste).

Desde el comienzo del invierno, hubo además otros 33 muertos por intoxicación con monóxido de carbono, por uso de artefactos o instalaciones de calefacción defectuosos.

En Brasil, en la última semana murieron como consecuencia de las bajas temperaturas nueve personas, la mayoría mendigos que dormían en la calle, y al menos 2.900 cabezas de ganado por hipotermia, según informes de los gobiernos regionales.

Sin embargo, las temperaturas volvieron a subir en los últimos dos días, por lo que el Instituto Nacional de Meteorología eliminó las alertas de frío para los estados sureños de Paraná, Mato Grosso, Mato Grosso do Sul, Santa Catarina y Río Grande do Sul.

La temperatura más baja en el país fue de 7,8 grados bajo cero, registrada el miércoles anterior en el municipio de Urupema.

En Uruguay, con la muerte de un indigente a consecuencia de una hipotermia en el departamento de Salto (norte), ya son tres las personas fallecidas desde que se desató la ola de frío a principios de la semana pasada.

Pese a que descendieron en los últimos días, las bajas temperaturas aún afectan a parte del país, donde la Dirección de Meteorología prevé temperaturas con mínimas de entre -1 y 2 grados y máximas entre 12 y 15.