Siete prisioneros condenados a morir en la horca por asesinar a dos personas albinas en la región de Shinyanga, en el noroeste de Tanzania, han apelado la sentencia que dictó contra ellos el Tribunal Supremo en septiembre del año pasado.

Fuentes del Tribunal Supremo han confirmado hoy que los procesados presentaron sus apelaciones pocos días después que se dictase sentencia.

Tanzania encabeza la lista de países africanos que utilizan a personas albinas en diferentes tipos de ritos supersticiosos.

Los hechiceros difunden creencias, especialmente en el norte del país, según las cuales los brebajes elaborados con partes cuerpos albinos proporcionan suerte y riqueza, lo que convierte a estas personas en piezas muy cotizadas para los más supersticiosos.

El presidente de Tanzania, Jakaya Kikwete, durante su felicitación de año nuevo dijo que las personas albinas asesinadas durante 2009 habían sido siete, una cifra sensiblemente menor que la de la de 2007, cuando se registraron 40 asesinatos.

"Los abogados defensores enviaron las apelaciones y los condenados se valieron de los funcionarios de prisiones para enviar otras desde la cárcel", explicaron fuentes judiciales.

El juez Rwakibalila fue el encargado de condenar a la pena capital a Masumbuko Matata, Emmanuel Masangwa y Charles Karamugi por asesinato, después de que considerase probado con los testimonios de quince testigos que habían asesinado a Matatizo Dunia, un joven albino de 14 años a quien luego cortaron las piernas para venderlas a practicantes de la llamada "magia negra".

El juicio quedó visto para sentencia en 52 días, todo un récord para un país cuyo sistema judicial es extremadamente lento y donde los procesos se prolongan durante años.

Los otros cuatro presos que presentaron apelaciones son Mboje Mawe, Chenyenye Kishiwa, Sayi Gamanya y Sayi Mafizi, condenados a la pena capital por el juez Mjemas gracias al testimonio de catorce testigos.

En Albania hay 170.000 albinos expuestos a la sinrazón de la superchería, y las víctimas mortales en zonas como Shinyanga, Mwanza, Rukwa se cuentan por docenas.