La creciente impopularidad, agudizada por la reciente ola de incendios forestales, y la crisis económica llevaron al primer ministro conservador griego, Costas Caramanlis, a adelantar las elecciones legislativas a octubre. "Pido al pueblo un nuevo mandato de gobierno, con un programa para afrontar la crisis económica mundial", dijo Caramanlis para justificar el anticipo de los comicios, dos años antes del fin de la legislatura.

"El año 2010 será difícil y se necesitan asumir medidas indispensables para superar la crisis. No hay soluciones fáciles", argumentó el líder conservador, que pidió la reelección para aplicar reformas.

Caramanlis se reunirá ayer con el presidente, Carolos Papulias, para pedirle la disolución del Parlamento y la convocatoria de elecciones, que se celebrarían en un plazo de 22 a 30 días, lo que sitúa los comicios entre el 4 y el 11 de octubre.

Las acusaciones al Ejecutivo de la prensa y de la oposición socialista por la mala gestión de los incendios forestales que arrasaron hace una semana 30.000 hectáreas en Grecia han hundido aún más a un Gobierno que se resentía en su popularidad y que sólo tiene mayoría por un escaño.

Las llamas se unieron al descontento existente por la crisis económica, los escándalos de corrupción y la oleada de disturbios tras la muerte de un adolescente por disparos de un policía durante el pasado mes de diciembre.