El modisto español Adolfo Domínguez está convencido de que, en el contexto actual de crisis económica, "el que resista ganará" y "si salimos al exterior, y lo estamos haciendo, remontaremos la situación".

Adolfo Domínguez registró unas pérdidas de 3,25 millones de euros en el primer trimestre de su año fiscal 2012-2013 -es decir, desde el 1 de marzo hasta el 31 de mayo-, lo que supone un descenso del 3,5% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior.

La compañía achacó este hecho a un entorno caracterizado por el "pronunciado deterioro" de la economía española, fundamentalmente por el retroceso del consumo, y a los esfuerzos dirigidos a la contención de costes y al desarrollo del mercado exterior.

Domínguez explicó en una entrevista concedida a Efe que "de cada 100 euros" que vende su Grupo, "40 los vendemos fuera, y dentro de 12 ó 18 meses, serán 50", remarcó, e hizo hincapié en la importancia de la expansión internacional.

Inventor de uno de los eslóganes más famosos de la moda española, "la arruga es bella", Domínguez desveló cómo se le ocurrió: "Yo crecí en el lino, mi abuela lo cultivaba, hilaba y tejía. Al meterme en el mundo de la costura sucedió que la gente ya había olvidado sus características, y me devolvían las camisas diciendo oiga que esto arruga".

"No tuve más remedio que sacar la frase. La naturaleza tiene estrías", apostilló.

Su gusto por la moda se remonta a cuando era un niño, y su padre tenía una sastrería en Ourense, "porque crecí en la tienda de mis padres y en el taller, y recuerdo los juegos con mis hermanos alrededor de las cajas de cartón". "Esto me estaba esperando en la vuelta de la esquina", detalló el diseñador gallego.