Dos miradas que confluyen en el mismo escenario. Eso es lo que oferta el teatro Leal de La Laguna en el espectáculo coreográfico que esta noche, a partir de las 21:00 horas, interpretarán las creadoras Carlota Mantecón y Teresa Lorenzo.

"Live", la propuesta artística de Mantecón, es fruto de una experiencia personal que surge en torno a una composición musical de la británica Diana Krall. Lorenzo, por su parte, ha construido un universo paralelo en torno a "El desencanto de Mefistófeles".

La bailarina Carlota Mantecón, formada en el London Contemporary Dance School, considera que "al día de hoy mi concepción del arte se aproxima mucho al terreno de lo social, es decir, es importante trabajar la base para que puedan ocurrir cosas que nadie espera que pasen", explica una creadora que en unos días comenzará una residencia en las instalaciones del Centro Coreográfico de La Gomera.

"Yo busco abrir nuevas vías desde lo pequeño; no me interesa esa parte comercial del mundo de la danza", argumenta una coreógrafa que "no cree" en los proyectos de las grandes compañías. "Mi idea es trabajar desde un plano individual para el beneficio de un colectivo, pero en ese proceso es determinante lo que cada artista pueda aportar al concepto de grupo".

Carlota Mantecón, que conoce desde dentro el funcionamiento del Laboratorio de Artes en Vivo del teatro Leal, considera vital la labor que está realizando el murciano Javier Cuevas al frente del LEAL.LAV. "Formar parte de este programa es una magnífica oportunidad para conocer situaciones nuevas que te ayudan a madurar como artista", declara justo antes de manifestar que "disfruto explorando las pequeñas formas que soy capaz de generar con mi cuerpo", reconoce la artífice de "Live".

Países como Dinamarca, Chipre, Francia, Finlandia, Grecia, Suecia o los que forman parte del Reino Unido, entre otros, ya han visto en vivo las coreografías de Mantecón, una tinerfeña que confiesa que "siempre se sube a un escenario con la sensación de que terminará aprendiendo algo nuevo", concluye Carlota.

Teresa Lorenzo inició en octubre de 2012 un proceso creativo que se desarrolló en dos etapas. La primera tuvo lugar en el teatro Victoria de la capital tinerfeña, mientras que la segunda se perfiló con una residencia en el Auditorio de Tenerife Adán Martín: "Con este proyecto doy un paso hacia delante desde el punto de vista del movimiento", revela una artista que se ha apoyado en una composición musical de Samuel Aguilar para dar vida a un desarrollo escénico en el que interactúa con un obra de José Soriano. "La danza tiene en Canarias muchas cosas por las que seguir luchando para obtener una mayor visibilidad", comenta Lorenzo.

La autora de "El desencanto de Mefistófeles" está convencida de que ha llegado el momento de que el público tome la iniciativa: "Los programadores están realizando un trabajo enorme, los bailarines no pueden hacer más esfuerzos y es el momento en que necesitamos ese calor... La gente tiene que hacer un esfuerzo para normalizar el concepto de danza contemporánea", incide una artista que se inició en el mundo de la coreografía hace trece años: "Empecé tarde en la danza, pero una vez dentro no he parado" apunta una mujer que se ha formado en centros de Barcelona, Madrid y Nueva York.

"Robert, cuando el teatro Victoria recibía aún alguna que otra ayuda económica, fue el impulsor de un movimiento coreográfico que hoy está sufriendo la crisis; no los ajustes porque los recortes y la falta de recursos siempre han estado muy presentes en la danza de Canarias", afirma en referencia a unos canales de financiación que "ahora están completamente cerrados".

A pesar del panorama oscuro que envuelve a esta variante de las artes escénicas, Teresa Lorenzo considera decisivo que "los profesionales de la danza sigan luchando por conseguir sus metas. Ahora, lo que no podemos hacer es rendirnos porque hay muchos artistas que están buscando alternativas para hacer visible su trabajo. No hay que tener miedo y olvidar tantas noticias malas", dijo.