El candidato socialista a la Presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha reivindicado este lunes los derechos conseguidos al amparo del Estado del Bienestar, de modo que ha pedido el voto para su partido, que "no es igual al PP", ha proclamado. "Ni yo soy igual que Rajoy, ni en el fondo ni en la forma, ni por arriba ni por abajo", ha enfatizado.

"Nuestro proyecto es radicalmente distinto", ha subrayado, ante unas 200 personas que se agolpaban en los pasillos de Palexco al no quedar espacio en el interior del recinto y que debieron seguir el mitin desde pantallas ubicadas en los pasillos, y posteriormente ante más de 500 personas que abarrotaban la sala Arao, y que le recibieron entre gritos de ''¡presidente, presidente!''.

Durante toda su intervención, ha tratado el socialista de diferenciar su programa del que representa Mariano Rajoy, consciente de que "la derecha está mandando ese mensaje para desmovilizar". Frente a ello, ha asegurado que ambos partidos pretenden "cosas distintas", ya que el PP defiende que "a quien Dios se la dé, San Pedro se la bendiga", mientras el PSOE aboga por el mantenimiento del Estado del Bienestar y por "políticas sostenidas en los valores" de esta formación.

"Tenemos valores muy distintos y, cuando hay encrucijadas, los valores son muy importantes", ha mantenido Rubalcaba, quien ha destacado que "los valores socialistas están en la base del Estado social", por lo que también "deben sustentar las políticas de salida de la crisis".

"Gobernar es tener ideas propias, no leer un papel que te han dictado, tener ganas de resolver, comprometerse y tener sensibilidad", ha proclamado, antes de advertir de que esas no son las cualidades que se apreciaron del líder del PP, Mariano Rajoy, durante el debate televisado.

Rubalcaba ha bromeado con que había cesado de inmediato al responsable de organizar el acto --"a veces saco el hacha"-- por calcular mal el número de asistentes. También ha provocado risas y aplausos del auditorio con un comentario al líder de los socialistas gallegos, Pachi Vázquez que aludía al día después de las elecciones: "Siempre has sido cariñoso conmigo, antes y ahora, iba a decir después pero eso ya Dios dirá".

DEFENSA DEL GALLEGO

Para argumentar las diferencias entre ambas fuerzas políticas, ha puesto de relieve la "excepcional riqueza" que supone, para los gallegos contar con dos lenguas --igual que ha hecho en todas los territorios con dos lenguas--. "A alguno no le gusta mucho", ha criticado, y ha proseguido también el "avance" en derechos de los gobiernos de izquierdas con el "retroceso" inherente a las políticas del PP.

"Nunca apoyaron el divorcio y también quieren retroceder en los matrimonios del mismo sexo y la igualdad entre hombres y mujeres", ha subrayado, sobre los recursos planteados por el PP al TC. "Yo creo y defiendo que cada persona pueda vivir, casarse y dormir con quien quiera", ha expresado, para censurar los "matices" de los que habla Rajoy. "Es como si dijese: a mí no me importa que duerman después de comer, pero que no le llamen siesta", ha comparado.

En cuanto a la igualdad entre hombres y mujeres, ha prometido Rubalcaba una ley que introduzca "cuotas obligatorias" para poner fin a "la asimetría intolerable" que existe en los consejos de administración y que no solucionó una ley sin cuotas. "Acabar con el machismo no es sencillo", ha admitido, consciente de que "queda mucho por hacer".

COPAGO SANITARIO

Al hilo de las diferencias en el ámbito social y de los servicios públicos, ha insinuado que el PP puede introducir un copago sanitario una vez constatado que el presidente de Murcia "ya dijo que le gusta" y que Alberto Núñez Feijóo, desde la Xunta, ha empezado a "enseñar la patita" con medidas como el cobro por "uso irresponsable". "Apesta a copago", ha apostillado.

Ha justificado sus dudas en que el PP "no explica en su programa" cómo va a abordar la financiación sanitaria. "Algo esconde", ha interpretado, tras recordar que los socialistas crearán nuevos impuestos sobre las bebidas alcohólicas de alta graduación y el tabaco y que exigirán a las autonomías que destinen a sanidad los fondos que aporta el Estado para ella.

CREACIÓN DE EMPLEO

No sólo en el ámbito social se distinguen los dos principales partidos, según Rubalcaba, sino que las diferencias llegan también a la parte económica de sus programas. Y es que los socialistas también apuestan por crear empleo pero, hasta que se logre, mantener "buenas prestaciones y servicios públicos". "El Estado debe dar seguridad a la gente y esa garantía la damos nosotros", ha defendido.

Precisamente para crear empleo, el socialista ha propuesto "abaratar la contratación y no el despido", lo que se conseguirá gravando los grandes patrimonios y fortunas. "Hay que repartir los costes de la crisis", ha incidido, y ha señalado que en otros países, como Francia, los que más tienen "se ofrecieron a hacerlo" mientras aquí el PP "les defiende".

Además, consciente de que "se van a tardar uno o dos años en crear empleo", se ha propuesto, de llegar a La Moncloa, "incentivar la economía" combinando los ajustes con incentivos públicos. "Sin inversión no hay creación de empleo", ha indicado, y ha reclamado a Alemania que "tire de Europa". "Porque así no salimos", ha aducido, y ha evidenciado que tomar este tipo de medidas es lo que significa "gobernar" y "no leer un papel que te han dictado".

Otro "disparate" que propone el PP y que el PSOE no comparte es cambiar la prestación del subsidio de desempleo a un sistema de "capitalización". "Si quieren cambiarlo, tendrán que decir la verdad a los españoles: que habrá menos prestación, en cantidad y en tiempo", ha advertido.

LLAMADA A VOTAR

Por todo, el candidato socialista, que volvió a disculparse con la gente que tuvo que quedarse fuera y les aseguró, entre risas, que había cesado al responsable de la organización del evento, ha pedido a los más de 1.500 asistentes --según el PSOE-- que le echen "una mano" para transmitir a los "desencantados" y a los "críticos" que "en democracia, nada es tan importante como un voto".

A renglón seguido, centrándose en aquellos que "creen que gobiernan los mercados", les ha asegurado que éstos "no han ganado la batalla". "Lo que se decidió políticamente, hay que quitarlo políticamente y hacen falta políticos que pongan unas reglas de juego", ha sostenido, en referencia a la capacidad de los poderes económicos para intervenir en los estados.

Y, a los que creen que ahora "toca al PP intentar" salir de la crisis, ha advertido Rubalcaba de las consecuencias que ha traído esta decisión en Portugal y Gran Bretaña. Tras esgrimir estos argumentos, ha pedido a los suyos que "hablen con la gente". "Esto no va de grandes eslóganes, sino de dar la cara", ha finalizado.

Tras este acto, y antes de recalar en Vigo, el exministro de Interior protagonizará tres "mítines de pequeño formato", de una duración aproximada de 15 minutos, en las localidades coruñesas de Oroso, Rianxo y Betanzos con el fin de "intensificar" su campaña.