El candidato del PSOE para las elecciones del 20N, Alfredo Pérez Rubalcaba, apostó ayer por las energías renovables y el cierre de las centrales nucleares a medida que se acabe su vida útil, frente al modelo energético de Mariano Rajoy, a quien, dijo, "le gusta más el uranio radiactivo".

Fue en un acto en Mahón sobre medio ambiente, en el que estuvo acompañado por el candidato por esta circunscripción, Guillermo García Gasulla, y la ex ministra Cristina Narbona, donde contrapuso los dos modelos energéticos que también están en juego en estas elecciones.

"Al PP le gusta más el uranio radiactivo, a nosotros nos gusta más el aire y el sol", proclamó, persuadido de que las dos opciones "no caben" y de que los españoles también estarán escogiendo entre estas alternativas cuando voten el día 20.

Según Rubalcaba, el país es ahora líder en energías renovables, pero no puede descuidarse porque Alemania ya anunció que va a cerrar las nucleares y "se ha metido de hocicos" en las energías limpias, por lo que o España se implica al mismo nivel que los germanos o acabará perdiendo ese liderazgo.

En este contexto, alertó sobre el riesgo de perder posiciones en un sector con tantas potencialidades como ese si gana el PP y pretende volver a fomentar la construcción y a los parámetros anteriores a 2004, cuando España gastaba el doble en deducciones por vivienda que en investigación y desarrollo.

"Por ello no pagamos"

"Por el sol y el aire no pagamos nada y eso no se agota", subrayó en alusión a las energías renovables frente a la nuclear o el petróleo, que se irá encareciendo a medida que se vaya agotando.

Para reforzar sus argumentos, adució que las renovables crean diez veces más puestos de trabajo, son más seguras, más limpias y más baratas a corto plazo, porque harán que España sea menos dependiente energéticamente.

En una isla como Menorca, que es reserva de la biosfera, Rubalcaba juzgó que hablar de futuro y de sostenibilidad "es hablar de lo mismo" y señaló que los españoles están preocupados por qué sistema de pensiones dejarán a sus hijos, por qué escuela, por qué sanidad, pero tiene que "preocupar tanto o más" qué suelo, qué agua o qué aire tendrán.

Narbona, por su parte, apostó por mejorar el marco de apoyo a las energías renovables y por incorporar en la fiscalidad la exigencia de sostenibilidad, a fin de establecer incentivos fiscales a las mejores energías y desincentivar el derroche y la contaminación.

De esa forma, a su juicio, "habrá menos deuda con los mercados, menos deuda con los bancos y menos deuda con el planeta".

No se olvidó Rubalcaba de "destapar" en su intervención el programa del PP que ese partido oculta de manera intencionada, según su criterio, y con una "ambigüedad calculada".

Y es que Rubalcaba está convencido de que "debajo de una frase ambigua en un programa de un partido que ha gobernado ocho años y que gobierna en muchas comunidades autónomas no existe más que la ambigüedad calculada".