La huelga parcial de controladores convocada hoy por los sindicatos en el Aeropuerto de Lisboa obligó a cancelar 18 vuelos y provocó retrasos en varias decenas de conexiones pese a la existencia de servicios mínimos.

Esta jornada de paros se encuadra en las protestas que los controladores llevan a cabo hoy en diferentes puntos de Europa, concretamente Alemania, Austria, Chipre, Eslovaquia, Francia, Italia y Hungría, además de Portugal.

Según los datos de la gestora de aeropuertos lusa ANA, en la terminal de llegadas del aeródromo lisboeta a las 9.00 GMT ya habían sido cancelados once vuelos (dos a Londres, dos a Roma, y uno a Madrid, Barcelona, Toulouse, Génova, Zúrich, Fráncfort y Málaga).

En salidas eran otras siete las conexiones suprimidas, concretamente a Barcelona, Oslo, Copenhague, Roma, Málaga, Lyon y París.

La mayoría de vuelos suspendidos pertenecía a la compañía aérea portuguesa TAP.

En el aeropuerto de Oporto, la huelga parcial generó importantes retrasos, de hasta tres horas de duración.

Fuentes sindicales apuntaron a un seguimiento de estas protestas en Portugal cercano al 100 % y subrayaron que los retrasos serán una constante a lo largo de todo el día.

Los paros se efectúan en suelo luso de 7.00 a 9.00 GMT y de 14.00 a 16.00 GMT.

La jornada de movilizaciones ha sido convocada por la Federación Europea de Sindicatos de Controladores Aéreos y por la Federación Europea de Trabajadores de los Transportes, que manifiestan así su rechazo al proyecto legislativo comunitario "Cielo Único Europeo".

Los trabajadores consideran que de entrar en vigor esta nueva normativa, la política de reducción de costes se impondrá entre las empresas de navegación aérea, y advierten de los riesgos que esto conllevaría en materia de seguridad.