El paro convocado por el SEPLA en Air Europa ha alcanzado su novena semana sin que haya acercamiento entre los pilotos y la dirección de la empresa, que ha sancionado a cuatro tripulantes técnicos por ejercer su derecho a la huelga, según han denunciado fuentes del sindicato.

Las fuentes han detallado que la compañía, que preside Juan José Hidalgo, ha sancionado a cuatro pilotos a un mes sin empleo y sueldo "por ejercer su derecho a la huelga y no acudir a un servicio que no estaba contemplado en los servicios mínimos".

El SEPLA ha asegurado que estas sanciones se enmarcan en la cadena de represalias emprendida por la compañía, que mañana celebrará una comisión disciplinaria en Palma de Mallorca para otro piloto que "hizo unas declaraciones críticas con algunas decisiones adoptadas por la empresa".

Entretanto, la huelga convocada contra la externalización de vuelos por parte de la compañía alcanza hoy su decimoséptima jornada con 28 vuelos cancelados y sin que haya acercamiento entre las partes.

Pilotos y empresa tan sólo han celebrado un par de reuniones "meramente formalistas" para constituir la mesa negociadora del II Convenio Colectivo de los tripulantes técnicos y definir la forma de trabajo y los puntos a abordar durante la redacción del nuevo acuerdo.

El próximo encuentro entre ambos se celebrará a partir del 7 de enero, a pesar de que el SEPLA es partidario de reunirse cada 15 días, pero los representantes de Globalia han calificado de "excesivo e innecesario" el calendario propuesto por el sindicato y han apostado por una frecuencia mensual.

A juicio del SEPLA, la actitud de la empresa demuestra su "falta de interés por avanzar y llegar a un acuerdo, a pesar de haber sido la propia compañía la que denunció el Convenio Colectivo".

La huelga de los pilotos de Air Europa se desarrolla desde el pasado 22 de septiembre todos los lunes y los jueves en protesta por la externalización de vuelos por parte de la compañía.

La empresa ha calificado el paro de injusto y tras conocer su convocatoria, Juan José Hidalgo aseguró que lo podía "aguantar indefinidamente".