Las peticiones de financiación de las empresas españolas, sobre todo de las pymes, crecerán en el primer trimestre del año, aunque por el contrario se reducirán las de las familias tanto para la adquisición de vivienda, como para consumo y otros fines. Esta es una de las previsiones que incluye la Encuesta sobre préstamos bancarios en España correspondiente a enero, publicada ayer por el Banco de España.

En ella, se añade que la reducción en las peticiones de financiación de las familias será "más marcada" en lo que se refiere a la compra de viviendas. El mismo estudio también indica que a pesar de las tensiones vividas en los mercados de deuda soberana, la oferta de préstamos en España se mantuvo "estable" durante el último trimestre de 2010.

Grandes compromisos

Dice que aunque los costes de financiación y la disponibilidad de fondos por parte de las entidades "fueron señalados como un factor que habría presionado hacia el endurecimiento de los criterios, la presión no llegó a materializarse en una variación" de éstos.

La estadística señala que la estabilidad en los criterios de aprobación de nuevos créditos fue generalizada, con la única excepción de los destinados a las grandes corporaciones, en donde se produjo un endurecimiento.

"Las condiciones de los préstamos se hicieron algo más restrictivas, ampliándose los márgenes aplicados a los préstamos ordinarios y a los de mayor riesgo, así como las garantías requeridas, mientras que el resto de condiciones permaneció sin cambios", asevera.