La cancillería china aseguró hoy que es "comprensible" la cancelación del diálogo comercial con Noruega después de que el Estado europeo apoyara la concesión del premio Nobel de la Paz al disidente encarcelado Liu Xiaobo.
"Creo que es comprensible que las autoridades competentes de China estén preocupadas y tengan reservas en promover las relaciones de cooperación con Noruega", señaló hoy la portavoz de turno del Ministerio chino de Asuntos Exteriores, Jiang Yu.
Noruega informó el pasado martes que el país asiático había postergado el diálogo bilateral sobre comercio, en una decisión relacionada con la concesión del Nobel al disidente chino.
De la misma manera, las empresas noruegas que comercian con el país asiático están sufriendo presiones y cancelaciones, según señalan fuentes del sector empresarial en Pekín.
La funcionaria recordó que el Instituto Nobel Noruego otorgó el nobel de la Paz a "un delincuente que cumple condena por romper la ley china, y el Gobierno noruego expresó abiertamente su apoyo".
Por tanto, prosiguió Jiang, "es difícil mantener relaciones amistosas con Noruega como sucedía en el pasado".
La portavoz calificó de "provocadora" la cuestión planteada por una periodista en la rueda de prensa cuando preguntó cómo se sentía el Gobierno chino al ser comparado con el nazi en este sentido, pues la última vez que el Nobel de la Paz fue concedido a un preso sentenciado por la Alemania nazi fue en la década de 1930.
La portavoz reiteró la postura expresada por Pekín desde que el 8 de octubre se dio a conocer la decisión de Oslo, señalando que se trata de "una flagrante provocación e interferencia en el sistema judicial chino".
Agregó que la sentencia del intelectual Liu Xiaobo, condenado en 2009 a once años de cárcel por "subvertir el poder del Estado" tras redactar un manifiesto político pidiendo la aplicación de leyes constitucionales, es similar a las existentes en otros países como el Reino Unido o Estados Unidos.
"El caso de Liu Xiaobo no es un problema de libertad de expresión, sino de respeto por nuestra soberanía judicial", agregó Jiang.
No obstante, la funcionaria declinó comentar los motivos por los que continúan detenidos la esposa del nobel, la poetisa y fotógrafa Liu Xia, y a más de cincuenta disidentes políticos, y las razones por las qué a algunos de ellos se les ha impedido abandonar el país para asistir a la ceremonia de entrega del Nobel el próximo 10 de diciembre en Oslo (Noruega).
El único disidente chino que asistirá al acto es el defensor de los enfermos del sida Wan Yanhai, exiliado en Estados Unidos desde este año.