El australiano Michael Matthews remató con doblete el trabajo del equipo Sunweb, con un esprint muy disputado que le llevó a la victoria en la decimosexta etapa, entre Le Puy-En-Velay y Romans-Sur-Isère, de 165 kilómetros, en la que Chris Froome (Sky) se mantuvo al frente de la general a las puertas de los Alpes.

Merecida victoria de "Bling", de 26 años, quien ya se había impuesto en Rodez, en una jornada en la que su equipo se empleó a fondo de principio a fin para eliminar al alemán Kittel y propiciar una llegada para el "aussie", quien no falló. Se impuso al noruego Boasson Hagen (Dimension) y al alemán John Degenkolb (Trek), quien reclamó sin éxito por posible maniobra ilegal del ganador.

Los hombres del podio entraron en el mismo grupo con un tiempo de 3h.38.15, a una media de 45,3 kms/hora, un ritmo alto después de la jornada de reposo. Cortado por los abanicos quedó el irlandés Dan Martin (Quick Step), lo que le costó el quinto puesto de la general en favor de Mikel Landa.

Más atrás remaba el español Alberto Contador, a 1.30 de los gallos, pérdida que no hizo mella al madrileño. Al contrario, a más de 11 minutos en la general, podría tener licencia para atacar este miércoles en la etapa del Galibier, la que tiene marcada en su calendario para salvar el Tour.

Ya entra la carrera en los Alpes. Las diferencias en la general son exiguas. Froome entra de comandante en jefe, pero con obligación de atacar para lograr diferencias que le allanen el camino hacia París. Fabio Aru entra en la batalla a 18 segundos, Bardet a 23 y el colombiano Urán a 29. Al acecho Mikel Landa con la caña preparada. El objetivo, proteger a Froome, el líder por el que sueña el Sky, pero ante el menor fallo, el español está dispuesto a asumir los galones.