La Escuela de Arte y Diseño Fernando Estévez cumple cien años en 2010, motivo por el que se ha organizado una exposición colectiva que hasta final de mes se podrá contemplar en el Centro de Arte La Recova de Santa Cruz de Tenerife. La muestra, que cuenta con la colaboración del Organismo Autónomo de Cultura (OAC) del Ayuntamiento de la capital tinerfeña, está formada por un centenar de obras, tanto de profesores del centro como de alumnos matriculados este curso en las distintas disciplinas que ofrece la institución: pintura, escultura, instalación, fotografía o diseño.

Celestino Hernández, profesor titular de Historia del Arte y ex vicedirector de la Escuela, en la que lleva casi treinta años como docente, valoró la exposición: "Ha sido un acierto mostrar este resumen de la historia de la institución en una triple vertiente. Por un lado, con la obra de profesores ya jubilados, o en algunos casos fallecidos, de un gran nivel artístico como Pedro González, Maribel Nazco o Rafael Delgado. En segundo lugar, a través de los trabajos de los profesores en activo, como por ejemplo el director Pedro Reidel o Gloria Díaz. Cada uno ha aportado una obra hasta completar el medio centenar del claustro de este curso. Y, por último, por supuesto, con las creaciones de nuestros alumnos".

Sólo dos sedes

La antigua Escuela de Artes y Oficios sólo ha tenido dos sedes en su larga historia: la actual, en el Camino del Hierro, desde hace quince años, y la primera, en la plaza de Ireneo González. Así lo valora Hernández: "No es común que una institución centenaria sólo haya tenido dos sedes. La muestra es, en este sentido, un homenaje a la ciudad de Santa Cruz de Tenerife, el único municipio donde han estado ubicadas las sedes de las enseñanzas artísticas en la isla. Esta tradición se romperá cuando esté terminada la nueva Facultad en La Laguna".

Hernández resumió la historia de la Escuela con estas palabras. "Esta institución es patrimonio de todos los canarios que han podido disfrutar de un centro excepcional por su carácter pedagógico, por la naturaleza artística de sus enseñanzas y por su capacidad de adaptación a los tiempos".

"No diré que es un privilegio dar clase en la Fernando Estévez porque una vez me costó algún problema -reflexionó Hernández-, pero sí supone una gran suerte poder trabajar en ella. En primer lugar, por su historia, ya que tuvo una gran importancia en la normalización de las Enseñanzas Superiores Artísticas en Canarias, cuando pasaron a depender de la Universidad de La Laguna en lugar de la de Sevilla", añadió.

Hernández resaltó el hecho de haber compartido docencia "con los más grandes de la enseñanza artística en Tenerife y en Canarias". El que fuera vicedirector de la Escuela, concluyó: "La Fernando Estévez fue el germen de la antigua Escuela Superior de Bellas Artes y de la Facultad de Bellas Artes. Ahora nos sentimos todos unidos en la enseñanza como una tarea académica y social con la cantera de los futuros profesionales del mundo del arte".