1.- Este es un otoño sin gracia. Nos han quitado casi todos los alicientes. Y lo peor es que el futuro se presenta igual de incierto y de negro que el presente. ¿Se trata de un pesimismo colectivo? ¿Se trata de percepciones erróneas por mi parte? ¿Soy yo solo el que no cree en ellos, en los que tienen la obligación de convencernos de que saldremos del atolladero? Es muy difícil creer en un Gobierno que miente a mansalva. Los periódicos de ayer hablaban de los guanajos que pueden sustituir a . Ni uno solo de ellos sirve, desde la Fernández de la Vega a la Chacón. No aportan nada, sólo mienten. Mienten descarada y alevosamente. Mienten sin contemplaciones. Mienten rotundamente. Mienten sin tino, compulsivamente. No han dicho una verdad desde hace años. Mienten hasta las encuestas que ellos manejan y las que manejan otros, como Coalición Canaria, que, por contacto, está igual de mentiroso que el Gobierno de Madrid. ¿Cómo no les da vergüenza?

2.- Yo creo que las elecciones de 2011 van a ser un fracaso de participación. Porque la gente no cree en ellos. La gente ve cómo anuncian que habrá dinero para fomentar el empleo y luego no se toma ni una sola medida que valga la pena. La gente ve cómo se dilapida el dinero de los impuestos en subsidiar a los desempleados y en crear, a la larga, una escuela de ociosos, una legión de más desempleados. A la hora de exigir algo a Madrid, a cambio de los pactos, los canarios somos la comparsa, la charanga. ¿Han visto, acaso, cómo funcionan los vascos, con qué contundencia? Nosotros regalamos los votos nacionalistas del Congreso. Y los votos canarios entregados a los partidos de ámbito estatal siguen cautivos, presos de las directrices de los que mandan desde Madrid. Qué desgracia.

3.- Otoño sin gracia y lleno de preocupación, a la vista de lo que ocurre. Otoño de mentiras terribles, gravísimas. Nunca había caído tan bajo un Gobierno, sin fuerzas para sacar adelante esto, sin ideas, sin vocación de reconciliar todas las voluntades nacionales, sino revanchista, ruin y embustero. Quemado su presidente, va a contagiar su propio incendio a todo el país. Dicen que le preparan el recambio, pero, ¿quién? De las listas que se publican no hay nadie que sirva. ¿Por qué no dan un paso Javier Solana, Joaquín Almunia, dónde están los intelectuales de este partido? Nos han dejado lo peor, lo intelectualmente más zafio. Lo más flojito del PSOE. Cualquiera lo hubiera hecho mejor.