ZAPATERO llegará a La Mareta para iniciar sus vacaciones con la satisfacción de haber dado a todos sus adversarios una lección de cómo perpetuarse en el poder. En efecto, con el "perverso" trágala del "todos ganarán más" con el nuevo sudoku de la financiación autonómica, el presidente en ejercicio se ha asegurado una vuelta de vacaciones tranquila, gracias al frente amplio de izquierdas en el que se ha tenido que alinear hasta Coalición Canaria.

El presidente se ha asegurado la mayoría necesaria para aprobar los Presupuestos de 2010; ha eliminado toda posibilidad de que surja una coalición alternativa de la Moncloa y prosigue la aplicación del "cinturón sanitario" para el PP, procurando que ni su principal adversario, ni CIU puedan llegar a reunir los recursos económicos, mediáticos y electorales para derrotar al que pasa, nacional e internacionalmente, por ser el más mediocre de los presidentes de Gobierno de esta sedicente democracia.

Duele reconocerlo, Pepe Ignacio, pero hay que ser consecuente. Zparo ha conseguido engatusar a todo el mundo político de su cuerda con un mecanismo que, legalmente, tiene una duración de cuatro años, pero sin comprometerse con cifras y datos exactos más que con quienes le garantizan los diputados necesarios para volver a ser presidente en 2012. No sólo ha engañado a los suyos, sino que ha dejado en la cuneta a sus adversarios. Zparo se garantiza el apoyo de los socialistas e independentistas radicales catalanes, y potencia su "califato andaluz", asegurando que entre esas dos "nacionalidades" disfruten de más de la mitad del dinero prometido, que no garantizado, para financiar la sanidad, la educación y los servicios sociales básicos del conjunto. Otra cosa es que los gobiernos catalán y andaluz, disponiendo de más dinero que los demás, vayan a prestar los mejores servicios sociales, pues gozarán de libertad para aplicar el dinero en lo que les convenga.

** ** **

El Gobierno central se permite además la chulería de, abusando de su poder, no facilitar las cifras de lo que van a recibir de más a ninguno de los contribuyentes que residen en los territorios del régimen económico-fiscal común. Sólo se ha comprometido en cifras ciertas con catalanes y andaluces. Al resto les asegura que recibirán más, como a Canarias, que pasó por las negociaciones de última hora de contar sólo con 200 millones de euros a recibir la promesa de que pasarán de 500. Pero sin conocer si los canarios dispondremos de una financiación igual o superior a la media. Todo dependerá de la evolución de la economía y, por consiguiente, del tipo de Presupuestos Generales del Estado que puedan aprobarse, aparte de los "cubileteos" de Zparo con el IGIC, el REF y los fondos especiales, sin que Canarias pueda disponer aún de la gestión del IVA o de los impuestos especiales como otras comunidades. Por lo que ni siquiera podrá beneficiarse de una reactivación del consumo. Sólo le queda la posibilidad de conseguir que le incrementen la cesión del IGIC, o que por fin se digne Zparo a cuantificar la ignorada "deuda histórica" con Canarias, o reconocernos en cuánto valora nuestra condición ultraperiférica.

** ** **

La perversidad del sistema se acrecienta porque en la mayoría de las comunidades, incluidas algunas gobernadas por socialistas, el incremento de sus recursos con cargo a la llamada financiación autonómica va a depender de la gestión que realicen del 50 por ciento del IVA y del IRPF que se les cede. A Canarias no es seguro que le vayan a dar la media nacional por habitante, aunque el objetivo del presidente Rivero sea superarlo durante las próximas negociaciones, tratando de rentabilizar su voto positivo a tan "perverso" mecanismo. Pero ni el Gobierno de Canarias tenía otra opción, ni la abstención de las comunidades gobernadas por el PP podían ir más allá, porque ¿cómo explicar en su comunidad que, si votaban en contra, pudiera el Gobierno central regatearle la entrega de los fondos que les corresponden? Zparo ya ha dado demasiadas pruebas de manejar el dinero público en su beneficio, premiando a los que le apoyan y penalizando a sus adversarios.

Además, el Gobierno tiene mayoría en el Consejo de la LOFCA, y por si acaso, antes que las CCAA de régimen común tuvieran que decidir su voto en 72 horas, sin conocer los datos y las cifras, les habían calificado de "catalanófobos". Al tiempo que se enteraban de que el Gobierno había establecido otro "perverso" mecanismo en el nuevo sistema que penaliza a las comunidades que se decidan a bajar los impuestos para dar oportunidad a empresas y emprendedores a crear empleo. Aparte de que esas comunidades tendrán sólo un año, en lugar de los tres de que dispondrán los que han dicho sí al sistema, para devolver el llamado "ajuste fiscal negativo", por lo que hayan recibido de más en 2008 y 2009. Así que Canarias no tenia más remedio que rendirse ante el "señor de La Mareta", y el PP y CIU han sido empujados al abismo electoral.

** ** **

Y por si la reactivación se demora, Zparo ha recurrido a articular cuatro fondos con los que proseguir su compra de votos. No importa que el Estado, o lo que queda de él, esté gastando ya, Pepe Ignacio, el doble de lo que ingresa. Ni que diferentes organismos europeos y nacionales adviertan que podemos sumar a finales de año una "deuda país" por encima del 9 por ciento del PIB. Lo que importa es poder seguir aplicando esa reforma encubierta de la Constitución que va a bendecir el Tribunal Constitucional con su inminente sentencia sobre el Estatut. Con el otorgamiento del voto a todos los inmigrantes, Zparo se asegura los doce millones de apoyos que necesita para alcanzar la mayoría absoluta en 2012, a fin de proseguir su política de aislar al PP y de jugar al trilero con los nacionalismos moderados.

Con ese fin ya está cuestionando el pacto PP-PSC en el País Vasco, y sigue metiendo cuñas en Canarias, Valencia y Navarra para intentar cosechar más votos en esas comunidades. De momento, la política del subsidio y de la creación de dinero para garantizarse el poder triunfa en toda la regla. Ni siquiera se mueven los parados. Total, si además les van a dar un año más de subsidio de hambre. La virtud de "Zapaterolandia" es que sus principales súbditos, los más desfavorecidos, están atrapados y no pueden reaccionar con un voto crítico frente a su dueño y señor. Pero algún día el dinero y la paciencia se acabarán. Ya se sabe que la fortuna es muy casquivana, y lo mismo que viene, se va.