El Cabildo de Gran Canaria ha informado de que mantiene activado el plan de emergencias ante la previsión de tormentas locales, señalaron este miércoles los consejero de Emergencias y Obras Públicas de la institución insular, Juan Manuel Brito y Ángel Víctor Torres, respectivamente, así como el director técnico del Plan, Federico Grillo.
De esta forma, el plan de emergencias se mantiene activo ante la posibilidad de lluvias fuertes localizadas, al igual que el personal del Cabildo de Gran Canaria para atender las incidencias que se pudieran producir.
Asimismo, se informó de que las vías afectadas por desprendimientos debido a las lluvias del martes, "están despejadas", de tal forma que "solo permanece cerrada la del Cenobio", según informó el Cabildo en nota de prensa.
En cuanto a las lluvias que sorprendieron a la isla en la tarde del martes, se indicó que si bien las precipitaciones provocaron "fuertes" retenciones e incidencias a la ciudadanía, "solo hay que lamentar un herido leve".
Brito, por su parte, indicó que a pesar de la "escasa posibilidad de predicción", este martes se actuó de forma "inmediata", ya que el plan de emergencias se activó desde el pasado jueves, movilizando en las últimas horas a "más de 300 personas de Protección Civil, Consorcio de Emergencias, bomberos, Consejo Insular de Aguas o ayuntamientos, además de los operarios de Obras Públicas".
Al respecto, señalan que la situación "se ajusta a la predicción esperada" pero puntualizaron que el comportamiento local "es prácticamente imprevisible" porque la falta de viento provoca descargas "muy localizadas que aparecen sin posibilidad de predicción".
En este sentido, Grillo afirmó que se prevé la "posibilidad de nuevas tormentas locales", por lo que se está "pendiente de que regrese la borrasca que se desplazó hacia el norte y ahora vuelve, un fenómeno de regreso completamente inusual".
CARRETERAS AFECTADAS
Por otro lado, Torres indicó que las carreteras afectadas por desprendimientos fueron seis, siendo la carretera GC-291 (Pagador - Albercón de La Virgen) y el carril de la GC-2 en sentido norte-sur desde el Km 15 (El Altillo) las "únicas" que permanecen cerradas, aparte de la de La Aldea que "no tiene fecha de apertura".
Al respecto, señaló que los retenes del servicio de carreteras, más de 150 efectivos, trabajan en la retirada de piedras, barro y aterramientos en varias carreteras, destacando que se reorganizaron los servicios, que funcionaron "perfectamente y realizaron un magnífico trabajo".
De todos modos, Torres explicó que las "mayores incidencias" se produjeron en la zona norte y en el área metropolitana de Las Palmas de Gran Canaria donde hubo desprendimientos "importantes que obligaron al cierre durante unas horas de la GC-2 a la salida del túnel de Silva en dirección Las Palmas de Gran Canaria, y del túnel Julio Luengo por exceso de agua en la calzada".
Asimismo, maquinaria especial tuvo que retirar una guagua y varios vehículos que quedaron atrapados en una riada de tierra y piedras en la GC-2 sentido Las Palmas de Gran Canaria en la zona de El Altillo.
Finalmente, en relación a la solución para evitar futuras inundaciones en Julio Luengo, Torres apuntó al proyecto para resolver los problemas de tráfico en el enlace de Torre Las Palmas que, dijo, "modificaría, en gran medida, la estructura del túnel y para la que se espera contar pronto con presupuesto por parte del Gobierno regional".