En España, el peso de la industria, incluyendo el sector de la energía, fue en 2012 el 16,9%, y en Canarias del 8, lejos del 26% alemán, y por debajo de la media europea, que se sitúa en el 19,3%. A fin de ganar en competitividad, sostiene CEOE-Tenerife, sería necesario disponer de mecanismos que ayudaran a aumentar el tamaño medio de las empresas industriales españolas.

Así, las empresas con una dimensión media han demostrado una mayor actividad innovadora, una mayor productividad, una probabilidad mayor de exportación y, por lo tanto, una mejor capacidad de respuesta ante la competencia exterior y mayores garantías de supervivencia en tiempos de crisis.

En el caso concreto de Canarias, la necesidad de adaptar medidas y políticas comunitarias a las características del territorio para compensar los extracostes derivados de la lejanía e insularidad se presenta "vital" para impulsar la competitividad del tejido productivo y, en concreto, del sector industrial. Una "efectiva" política comunitaria adaptada a la ultraperificidad y la consolidación y mejora de las medidas existentes, permitiría lograr la necesaria continuidad del territorio, haciendo con ello una realidad el mercado único.

En este sentido, el Régimen Económico y Fiscal de Canarias (REF), que se constituye como el principal instrumento de política económica de las Islas, juega un papel "crucial", ya que en él se articulan una serie de medidas de compensación "imprescindibles" para el desempeño de cualquier actividad económica en el Archipiélago.

De esta manera, y ante su próxima renovación, la patronal tinerfeña considera "vital" el impulso de estas medidas para lograr el desarrollo económico del sector productivo del Archipiélago.