El Gobierno de Canarias tiene la obligación ética de facilitar que el trabajo que se crea en las islas sea en primer lugar para la gente que vive en el Archipiélago, dijo hoy el presidente del Ejecutivo canario, Paulino Rivero.
De este modo habló Paulino Rivero en el acto en el que Francisca Luengo tomó posesión del cargo de consejera de Empleo, Industria y Comercio, en sustitución de Margarita Ramos, y el presidente canario añadió que para conseguir que el empleo sea en primer lugar para los residentes hay que mejorar la formación y la cualificación.
Paulino Rivero, que agradeció el trabajo, entrega, lealtad, esfuerzo, respeto y consideración de Margarita Ramos, deseó mucha suerte a Francisca Luengo porque si la tiene se beneficiará la sociedad canaria.
Los actuales son momentos difíciles para familias, autónomos y pequeños y medianos empresarios, pero también para los responsables públicos, para quienes tienen que administrar unos recursos escasos, aseguró el presidente canario.
Paulino Rivero dijo en estos momentos difíciles es complicado tomar decisiones para establecer prioridades, que, añadió, el Gobierno canario tiene muy claro que deben ser las de garantizar la cohesión social, y para ello es preciso poner en valor la sanidad, la educación y las políticas sociales.
Pero también el empleo, destacó Paulino Rivero, quien afirmó que el Gobierno que preside seguirá haciendo un gran esfuerzo en favor de las políticas relacionadas con el crecimiento económico y el empleo.
También estableció como prioridades las luchas contra las contrataciones fraudulentas y la economía sumergida, y Paulino Rivero habló de la necesidad de adoptar medidas para diversificar la economía, así como para impulsar políticas energéticas hacia la sostenibilidad, y fortalecer el comercio, en especial el de las zonas abiertas.
El presidente canario se refirió asimismo a la necesidad de trabajar "codo con codo" con los agentes sociales y económicos de la Comunidad Autónoma.
Paulino Rivero manifestó que el trabajo con sindicatos y empresarios será una constante, y habrá diálogo hasta la "extenuación", y si no es posible el consenso el Gobierno de Canarias tomará decisiones teniendo en cuenta el interés general de los ciudadanos, concluyó.