"Este plan es la mejor expresión del alto grado de consenso entre todos los agentes socioeconómicos sobre las necesidades formativas que existen actualmente en Canarias", aseguró ayer José Moya, director general de Formación Profesional y Educación de Adultos del Gobierno regional, tras clausurar las jornadas Impulsa con la presentación del Plan Canario de FP 2012-2016.

El documento señala que los tres pilares sobre los que se sustenta el desarrollo económico de las islas -hostelería y turismo, comercio y servicios- no van a cambiar sustancialmente, pero abre dos nuevos ámbitos para la formación: el sector primario y el de las energías renovables.

Según Moya, el plan es "la expresión de las necesidades formativas generadas en Canarias, tal y como las perciben los agentes económicos, sociales y educativos. Un texto -continuó- que orienta, a través de objetivos concretos y acciones detalladas, las actuaciones de la administración pública para satisfacer esas necesidades".

En cuanto a la agricultura, el Gobierno destaca la necesidad de aportar a los sectores tradicionales empleo de alta tecnología como valor añadido para, de esta forma, aumentar la productividad, ofrecer un producto o servicio de mayor calidad, ligado a personal más cualificado, lo que finalmente repercute en la creación de empleo, comentó Moya.

El Ejecutivo también considera que el campo de las energías renovables está por descubrir desde el ámbito formativo, en un momento en el que las empresas relacionadas con el medio ambiente reclaman titulados altamente cualificados.

Organizadas por la Dirección General de FP, las jornadas están cofinanciadas con fondos europeos Feder y forman parte del Proyecto Impulsa, una iniciativa que busca un crecimiento económico basado en el conocimiento.