Científicos del Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER), que en la actualidad forman parte del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan), y del Centro de Investigaciones Geoquímicas (GRC), dependiente de la Universidad de Tokio (Japón), han publicado recientemente los resultados de un estudio sobre las variaciones espacio-temporales de corto y largo periodo de la desgasificación difusa de dióxido de carbono (CO2) por el sistema volcánico de Timanfaya (Lanzarote).

En este trabajo científico, publicado por la revista internacional ''Applied Geochemistry'' de la Sociedad Geoquímica Internacional, se presentan los resultados de ocho campañas geoquímicas realizadas en el ambiente superficial del sistema volcánico de Timanfaya entre los años 2006 y 2011 con el objetivo de evaluar las variaciones espacio-temporales de largo y corto periodo de la emisión difusa de (CO2).

Las áreas con mayores valores registrados de flujo difuso de dióxido de carbono han correspondido a zonas con mayor vegetación, lo que sugiere una fuerte influencia de la actividad biogénica en el suelo.

Paradójicamente, en aquellas zonas caracterizadas por altos flujos de calor --Islote de Hilario, Casa de los Camelleros y Montaña del Fuego-- se midieron flujos relativamente bajos de CO2, lo que indica una insignificante contribución de gases de origen profundo --magmático--.

Las tasas de emisión difusa de dióxido a la atmósfera por el sistema volcánico de Timanfaya variaron entre 41 y 518 toneladas diarias durante el periodo 2006-2011. Fue en febrero de 2011 cuando se estimó la máxima tasa de emisión de CO2.

Con objeto de investigar las variaciones temporales de corto periodo y la influencia de variables meteorológicas sobre el flujo difuso de dióxido de carbono, en julio de 2010 se instaló una estación geoquímica automática cercana a la Casa de los Camelleros, dentro del Parque Nacional de Timanfaya.

Los resultados indican que las variables externas ejercen un efecto determinante en la dinámica de la desgasificación difusa de CO2 en Timanfaya, tanto en periodo corto como en periodo largo. Dicha desgasificación fue principalmente controlada por el contenido en agua del suelo y por la presión barométrica.

Este estudio presenta un interés adicional, ya que son pocos los trabajos publicados en los que se ha investigado las variaciones espacio-temporales de periodo corto y largo de la desgasificación difusa de dióxido de carbono registradas tanto en modo continuo --a través de estaciones geoquímicas que nos permiten realizar el registro puntual del flujo difuso de CO2 las 24 horas del día y los 365 días del año-- como en modo discreto --a través de campañas científicas periódicas de emisión difusa de dióxido que conlleva la realización de centenares de medidas de flujo difuso de CO2 en todo el sistema volcánico a investigar--.

EMANACIONES "DISPERSAS Y SILENCIOSAS"

Los volcanes emiten importantes cantidades de gases a la atmósfera a través de sus manifestaciones visibles como penachos, fumarolas y hervideros, pero numerosos trabajos de investigación realizados durante los últimos 20 años reflejan que importantes tasas de emisión de gases pueden también ocurrir a través del ambiente superficial de los sistemas volcánicos de una forma no visible, difusa, dispersa y silenciosa. Este último tipo de manifestación se conoce también como emanaciones volcánicas difusas que se caracterizan principalmente CO2.

La monitorización de estas emanaciones difusas en sistemas volcánicos es de una gran utilidad en la vigilancia volcánica por ser el de dióxido de carbono el segundo componente mayoritario de los gases volcánicos después del vapor de agua y por su baja solubilidad en el magma, lo que provoca que el CO2 se escape con suma facilidad de los sistemas volcánicos en profundidad.

Estas emanaciones son invisibles al ojo humano, pero pueden ser detectables con sensores de infrarrojo portátiles que permiten evaluar la cantidad de dióxido que está emitiendo el sistema volcánico a la atmósfera así como detectar la localización de sus emisiones anómalas.

Sin embargo, para evaluar correctamente los estudios de emisión difusa de gases con fines de vigilancia volcánica es muy importante eliminar la influencia de factores externos como los meteorológicos.

La detección de cambios significativos en los valores de emisión difusa de CO2 en áreas volcánicamente activas así como cambios en la distribución espacial de las emisiones anómalas de dióxido de carbono en el ambiente superficial pueden estar ligados a movimientos de magma en el subsuelo y cambios de la actividad sismovolcánica; por lo tanto, serán excelentes señales de alerta temprana sobre el fenómeno volcánico.

Este trabajo ha podido materializarse gracias a la financiación de los proyectos Timanfaya ''Emisión difusa de dióxido de carbono (CO2) por el sistema volcánico de Timanfaya, Lanzarote (CGL2008-06345)'' co-financiado por el anterior Ministerio de Ciencia e Innovación y Makavol ''Fortalecimiento de las capacidades de I? para contribuir a la reducción del Riesgo Volcánico en la Macaronesia (MAC/3/C161)'' que está siendo co-financiado por el programa de cooperación transnacional de la Unión Europea Madeira-Canarias-Azores (MAC 2007-2013), así como a la colaboración de los Cabildos Insulares de Lanzarote y Tenerife y del Parque Nacional de Timanfaya.