El proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2012 supone para Canarias, entre otras cuestiones, paralizar la inversión en infraestructura pública y obligará a su gobierno a tomar decisiones excepcionales, de emergencia, para poder garantizar los servicios básicos a los ciudadanos, afirmó hoy el presidente canario, Paulino Rivero.

Esta fue la respuesta que Paulino Rivero dio en el Parlamento de Canarias a una pregunta del diputado del grupo Mixto Román Rodríguez, de Nueva Canarias, acerca de lo que para la Comunidad Autónoma supondrán los recortes anunciados en el proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado para este año.

El presidente canario dijo que con los presupuestos anunciados por el gobierno del PP se empobrece los servicios básicos, es decir, sanidad, educación y prestaciones sociales, y supondrán paralizar las inversiones, así como un frenazo al crecimiento económico de las islas en un momento en el que la Comunidad Autónoma crece por encima de la media española.

El diputado del grupo Mixto Román Rodríguez aseguró que si no hay cambios en el proyecto de ley de presupuestos Canarias sufrirá un varapalo y añadió que si los ingresos fallan entre 800 y 1.200 millones de euros sobre lo previsto no se podrá cumplir con las competencias.

La diputada socialista Dolores Padrón también preguntó a Rivero por el proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado que, afirmó, está hecho para socavar el estado del bienestar con la excusa de la crisis económica.

El proyecto de presupuesto, a juicio de Padrón, es un ataque de la "derecha españolista más rancia" y comentó que el recorte anunciado de 10.000 millones de euros en sanidad y educación de llevarse a cabo significará que en materia sanitaria en Canarias habrá que reducir a la mitad el presupuesto autonómico.

La diputada popular María Australia Navarro también preguntó a Rivero por el proyecto de ley de presupuestos del Estado y dijo que se trata de una respuesta a una economía en crisis de un país en riesgo de ser intervenido, y con el que su partido responde a una herencia envenenada.

María Australia Navarro insistió en que con el proyecto de presupuesto se trata de sanear la deuda pública, que tiene, añadió, una desviación de 25.000 millones de euros que "ocultó" José Luis Rodríguez Zapatero.