Tal vez de la decisión final salgan más unidos que nunca, pero en estos momentos la división de los socialistas canarios vuelve a ser total. La elección del nuevo secretario general, cargo que dejará José Luis Rodríguez Zapatero, ha reabierto viejas heridas, que en los últimos meses se habían mantenido ocultas bajo la venda del poder.

Así se desprende de las manifestaciones realizadas por distintos dirigentes y cargos públicos del PSC-PSOE, que no han dudado en posicionarse a favor o en contra de los, por el momento, únicos candidatos a relevar a Rodríguez Zapatero: Alfredo Pérez Rubalcaba y Carme Chacón.

Aunque parece que este es un mal extendido por gran parte del territorio español, pues los socialistas se muestran enfrentados en casi todas las regiones, el conflicto en Canarias presenta ciertos tics repetidos.

Y es que detrás del respaldo a un aspirante u otro se esconde gran parte del problema que ha generado la división interna de los socialistas de las Islas: el apoyo o no, la identificación o no con Juan Fernando López Aguilar.

Comprometido con la idea de partido que defiende la exministra de Defensa, los críticos con López Aguilar lamentan que haya hecho de la elección del aspirante a la Secretaría General del PSOE un "plebiscito" hacia su persona. "Ha querido ser protagonista sin presentarse", subrayan miembros de este sector del PSC, que aseguran también que tanto protagonismo suyo "está perjudicando" a Carmen Chacón.

A juicio de estos miembros del PSOE canario, con sus movimientos precongresuales el exsecretario general de los socialistas de las Islas está intentando allanar el camino para, si gana Chacón, "colocar" a alguien de su confianza en el PSC.

Certero o no este planteamiento, lo cierto es que quienes más claros se han mostrado a la hora de apoyar a Pérez Rubalcaba han sido dirigentes afines a la dirección regional, precisamente aquellos que desplazaron a López Aguilar de la Secretaría General en un congreso extraordinario.

Francisco Hernández Spínola, vicesecretario general del PSC y consejero de Presidencia, Justicia y Seguridad del Gobierno de Canarias, por ejemplo, defiende que el socialismo canario ganará peso en los órganos federales si Pérez Rubalcaba resulta finalmente elegido secretario general del PSOE y que, además, se respetaría la autonomía política del partido en el Archipiélago dentro del proyecto común.

En esta línea, Julio Cruz, secretario de Organización, habla de "neutralidad" sobre la posición de la Ejecutiva regional, pero reconoce haber firmado el aval para hacer candidato a Rubalcaba, un apoyo que también ha mostrado en forma de aval Gloria Rivero.

Con todo, Cruz considera que el apoyo a Rubalcaba o Chacón "no tiene por qué" dividir al PSC, pues se trata de una "elección interna" en la que todos "debemos" apostar por alguien.

Frente a la opinión estos últimos se muestra Patricia Hernández, diputada nacional y defensora en las Islas de la candidatura de Carme Chacón. Cercana a los planteamientos que defendió López Aguilar en las Islas, Hernández afirma que "no toda" la dirección regional e insular (Tenerife) apoya a Pérez Rubalcaba, y recuerda que en los procesos congresuales "cada militante, independientemente del cargo, tiene un voto". "Este es un proceso de militantes y no de sus ejecutivas", remarca la diputada, que sostiene, además, que lo que se va a celebrar es un congreso federal y no uno regional.

Precisamente, Lola Padrón, presidenta del partido en las Islas, criticó ayer la visita realizada días atrás a las Islas por el secretario de Relaciones Institucionales y Política Autonómica del PSOE, Gaspar Zarrías, para recabar apoyos en favor del exministro de Interior.

Padrón dijo no entender por qué no fueron convocados los siete secretarios insulares a la reunión con Zarrías, y calificó la cita como "reunión a la grancanaria".