Los alumnos serán la prioridad de la Consejería de Educación, Universidades y Sostenibilidad, que tiene un buen diagnóstico de la situación educativa, unos objetivos definidos y la voluntad de acometerlos, aseguró ayer el consejero, José Miguel Pérez, quien destacó que los niveles de rendimiento educativo que tienen en cuenta las dificultades socioeconómicas del alumnado sitúan Canarias por encima de lo esperado.

La viceconsejera de Educación y Universidades, Manuela de Armas, que tomó posesión ayer de su cargo, indicó que la lucha contra el fracaso escolar y el abandono de los estudios serán sus prioridades. Asimismo, se mantendrá la atención temprana y se intentará una mayor coordinación de los equipos educativos, para lo que será necesario escuchar las necesidades de todas las partes, dijo Armas. Respecto a la austeridad a que obliga la actual crisis económica, destacó la necesidad de optimizar los recursos, pues "a veces con poco se puede hacer mucho" con suficiente "voluntad, organización y las cosas claras".