El presidente de Cruz Roja en Canarias, Alejo Trujillo, admitió ayer que su organización no se ha visto obligada a la suspensión de ningún proyecto social, aunque sí matizó que se han impulsado aquellos que se dedican "a lo trascendental" que es atacar la vulnerabilidad, dar alimentos, desayunos y ayudar al pago de alquileres.

Trujillo dijo en declaraciones a los medios antes del acto de la presentación de la campaña oficial del Sorteo del Oro 2011 que no se han suspendido proyectos, "pero sí se han reducido actividades menos necesarias".

Aquí precisó que también han puesto sus esfuerzos en temas de inserción de empleo y detalló que se ha trabajado con unas 2.500 personas, de las que casi 300 ya se han insertado.

"En los tiempos que corren es cifra que nos ilusiona", afirmó, antes de señalar que "la situación ha empeorado y no se va a recuperar el modelo que hemos dejado. Nunca más. La situaciones han cambiado y han cerrado empresas", dijo, para añadir que hay que abogar por que haya más solidaridad y formación.

En este punto aprovechó para indicar, tras la muerte de varios indigentes en la isla de Tenerife, que situaciones de este tipo con personas sin techo "siempre pasan, pero ahora se notan más". "Da mucha pena que suceda esto en una sociedad en pleno siglo XXI", lamentó.

Sobre el sorteo del oro, dijo que empezó a celebrarse en la década de los ochenta del siglo pasado y forma parte de los recursos propios de Cruz Roja.