JOSÉ Manuel Bermúdez, bien situado en las encuestas, está haciendo un gran esfuerzo para que los vecinos de Santa Cruz le voten. Se le ve en todas partes, sin grandes alharacas, pero realizando una labor muy persuasiva a pie de calle. Le acompañan sus compañeros de candidatura y jóvenes al servicio de Coalición Canaria, que ponen, vamos a llamarlo así, la nota de color.

José Manuel Bermúdez lleva años rumiando ser candidato a la Alcaldía de la capital. Puede que, finalmente, consiga el cargo de primer edil; por el momento, tiene más papeletas que nadie. Coalición se presenta muy unida, sin fisuras, y solo la negativa de Bermúdez a admitir a Esther Sarrautte como representante del PNC en sus listas ha empañado la relación con los aliados.

También beneficiará a Bermúdez -y posiblemente a Cristina Tavío- la ausencia en las listas (si se llega a confirmar) de Guillermo Guigou y Ángel Isidro Guimerá. Y la concurrencia de los escindidos del PSOE, a quienes capitanea un tal Corrales, ex del PSOE, procedente de IU y ahora en las filas de un partido que se llama Socialistas por Tenerife; uno más en la sopa de letras.

Bermúdez ha presentado un programa muy atractivo para la ciudad. Y ha hecho un equipo nuevo, con solo dos concejales de Miguel Zerolo en la lista: Hilario Rodríguez y Ángela Mena. Su apuesta por el turismo es interesante y su intención de revitalizar la zona comercial nos parece muy apropiada. Para ello, lo primero que tendrá que hacer es lavar el cerebro a los tenderos, los más retrógrados de la historia comercial de las Islas, y más pasados de moda que Machín. Con sus honrosas excepciones.

Esta campaña -de casa en casa- del candidato ha dado siempre a ATI/CC los mejores resultados. Es decir, que se vuelve al viejo método del uno a uno, pronto vendrán los bocadillos de mortadela y las reuniones de la tercera edad. Lo de siempre. Cualquier cosa de estas es lícita para conseguir un voto, porque en democracia vale igual el voto a cambio de mortadela que el voto razonado del licenciado. Igual.

Coalición Canaria perdería gran parte de su identidad si no consigue, per se o en colaboración, la Alcaldía de la ciudad. Es una cuestión de principios. Santa Cruz es su acorazado Potemkin. Así que José Manuel Bermúdez tiene ante sí un gran reto y arrastra una gran responsabilidad.

De ahí su dedicación y su afán y la elección de un equipo joven, con ganas y muy comprometido con la idea nacionalista. Veremos hasta dónde llega, con la ola del PP que viene.