Cuando todo vuelva a la normalidad, es decir, cuando se le gane la batalla al Covid 19, las asociaciones de vecinos, los grupos del Carnaval y otras entidades volverán a llenar de vida los locales municipales que ocupaban antes de la pandemia, y que aún hoy permanecen vacíos y sin actividad alguna. Para que lo hagan en las mejores condiciones, y aprovechando que debido a las restricciones no pueden ser utilizados, el Ayuntamiento de Santa Cruz iniciará este mes el plan de choque para su puesta a punto, anunciado en noviembre del año pasado por EL DÍA. Este consiste en la ejecución de una serie de obras de mejora y acondicionamiento de unos 40 inmuebles distribuidos a lo largo de todo el municipio, “resolviendo las principales demandas manifestadas por las entidades que los ocupan”. El Consistorio invertirá unos 700.000 euros.
El alcalde, José Manuel Bermúdez (CC); el concejal de Infraestructuras, Dámaso Arteaga (CC); el edil del Distrito Centro-Ifara, Guillermo Díaz Guerra (PP); el concejal de Vivienda, Juan José Martínez (CC), y técnicos municipales visitaron ayer algunos de los locales, en concreto, los situados en la calle de La Noria. Arteaga explicó que en estas visitas, que “se suman a las 25 que ya hemos realizado en otros distritos, como por ejemplo en La Salud, estamos evaluando y valorando los arreglos que debemos hacer”. “La idea es llevar a cabo un lavado de cara de estos inmuebles”, añadió.
Verano
El edil de Infraestructuras comentó a este periódico que, en líneas generales, se realizarán obras relacionadas con las cubiertas, filtraciones, humedades o mejora de las fachadas. La previsión es que todos los locales municipales en los que el Ayuntamiento va a intervenir estén listos de cara al verano. Por ejemplo, en la visita realizada a los inmuebles del Consistorio situados en La Noria, y que sobre todo ocupan grupos del Carnaval, la murga Triqui Traques alertó a la Corporación de que “el agua que sale del grifo es naranja por un problema de las tuberías en el interior del local” y de que “cuando llueve, las paredes de la zona en la que ensayan se mojan”. En otra de las casas del Ayuntamiento, la número 43 de La Noria, que fue cedida en su momento a la iglesia de La Concepción, “tendremos que ejecutar un proyecto más amplio, porque está en muy mal estado, tanto es así, que lleva tiempo desocupada”.
“Vamos a intentar dar respuesta a todas las necesidades detectadas, pues queremos que la vuelta a la normalidad en los locales municipales se realice en las mejores condiciones posibles. En estos días, estamos recogiendo las demandas y propuestas de las entidades ciudadanas que ocupan los inmuebles, y en breve comenzaremos a intervenir”, señaló Arteaga. Este recordó que el Consistorio ha encargado la ejecución de las mejoras a la sociedad Viviendas, Proyectos y Obras Municipales.
El responsable de dicha sociedad, el edil Juan José Martínez, explicó ayer que se ha contratado a una cuadrilla para que lleve a cabo las intervenciones necesarias.
