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Arturo Jiménez
Ver galería >Puerto de la Cruz acogió la noche de este viernes 7 de marzo una nueva edición del Mascarita Ponte Tacón, donde cientos de atrevidas mascaritas se subieron a sus y plataformas para disfrutar y hacer disfrutar de una noche llena de risas y caídas en los escasos seiscientos metros que unen la plaza de los Reyes Católicos y la plaza del Charco. El Mascarita Ponte Tacón no es solo una competición, sino un encuentro donde el Carnaval se vive como una expresión de transgresión y diversión. Los participantes disfrutan de la fiesta con entusiasmo desde el primer instante hasta el final, en un ambiente sano y de humor. El año pasado atrajo a nada menos que 450 valientes.
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Puerto de la Cruz acogió la noche de este viernes 7 de marzo una nueva edición del Mascarita Ponte Tacón, donde cientos de atrevidas mascaritas se subieron a sus y plataformas para disfrutar y hacer disfrutar de una noche llena de risas y caídas en los escasos seiscientos metros que unen la plaza de los Reyes Católicos y la plaza del Charco. El Mascarita Ponte Tacón no es solo una competición, sino un encuentro donde el Carnaval se vive como una expresión de transgresión y diversión. Los participantes disfrutan de la fiesta con entusiasmo desde el primer instante hasta el final, en un ambiente sano y de humor. El año pasado atrajo a nada menos que 450 valientes.
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Puerto de la Cruz acogió la noche de este viernes 7 de marzo una nueva edición del Mascarita Ponte Tacón, donde cientos de atrevidas mascaritas se subieron a sus y plataformas para disfrutar y hacer disfrutar de una noche llena de risas y caídas en los escasos seiscientos metros que unen la plaza de los Reyes Católicos y la plaza del Charco. El Mascarita Ponte Tacón no es solo una competición, sino un encuentro donde el Carnaval se vive como una expresión de transgresión y diversión. Los participantes disfrutan de la fiesta con entusiasmo desde el primer instante hasta el final, en un ambiente sano y de humor. El año pasado atrajo a nada menos que 450 valientes.
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