Los billetes de avión no tienen un precio fijo, por lo que se puede ahorrar mucho si sabemos cuándo comprarlo.  Cuando vamos a comprar un billete para desplazarnos en avión hemos de saber que su precio no solo varía dentro de una temporada (suelen ser más caros en verano y fechas similares), sino que también lo hacen dependiendo del día de la semana.

Para comprar un billete barato, el mejor día de la semana es el martes a partir del mediodía. Esto sucede porque las aerolíneas ponen ofertas los lunes, y al día siguiente todo aquel que vende billetes tiene que bajarlos para hacer su precio atractivo.

Se pueden encontrar descuentos con respecto al precio normal de hasta el 25 %, lo cual no está nada mal si tenemos en cuenta lo que puede llegar a costar un viaje en avión.

Estos importes también varían dependiendo de la hora, así que los mejores los vamos a obtener en vuelos que salen por la mañana muy temprano y en los que despegan a media tarde.

Los meses más económicos, siempre son los de inicio del invierno y los previos a la Navidad, así que lo podemos tener en cuenta si queremos visitar un sitio y no tiene que ser en un mes en especial.

¿Qué más trucos se pueden emplear con el fin de encontrar vuelos baratos?

Existen algunas tretas más que nos van a permitir gastar lo menos posible al comprar los billetes, como hacer las búsquedas de los precios en incógnito, pues así las aerolíneas no podrán usar las cookies y no sabrán que estamos consultando sus billetes, subiéndolos cada vez que lo hacemos.

También podemos optar por aeropuertos cercanos a donde nos vamos a desplazar, dejando el principal o más importante, puesto que a cambio de un viaje en autobús de una hora o incluso menos, el precio del avión es mucho más atractivo.

Por último, poder sacar el billete con más de dos meses de antelación es algo que lo rebajará de manera drástica, y quizá el mejor truco que podemos utilizar si no queremos pagar tanto por nuestros desplazamientos.