El turismo es el principal motor de Canarias. Desde Spring Hotels, su director de innovación destaca 10 medidas relevantes. Estrategia, transformación y capacidad de adaptación son tres de las principales para afrontar en un futuro próximo el sector en las Islas.

1. Estrategia común público-privada

Es necesario un propósito compartido, y éste debe ser transformador y englobar acuerdos inteligentes que permitan rentabilizar al máximo los recursos. Debe haber una estrategia común para consolidar el destino, con los mismos valores para empresarios y Administración y el compromiso de ambas partes. Sólo si somos capaces de ir en la misma dirección podremos competir en los retos globales de la era digital.

2.Transformación

La capacidad de transformar el modelo turístico pasa por lo digital y es necesario transformarlo. La transformación digital no es sólo digitalizar empresas o procesos sino impulsar, ampliar y reinventar nuestro negocio en el actual entorno digital. Las Administraciones juegan aquí un papel fundamental en la democratización del modelo para hacer llegar las soluciones, herramientas y el conocimiento a todo el tejido empresarial pero es el privado el que tiene la capacidad y la necesidad de liderarlo.

3.Capacidad de adaptación

La incertidumbre actual debe impulsarnos a renovarnos para poder enfrentarnos a un nuevo panorama en el que la supervivencia dependerá de la agilidad de respuesta ante situaciones imprevistas. La vuelta a la normalidad traerá unos nuevos hábitos y tendencias y por tanto la transformación ya no tendrá vuelta atrás. Cuando reabra el turismo la competencia será voraz y necesitamos que nuestro destino esté más reforzado que nunca y enfocado en escuchar y dar adecuada respuesta a las nuevas tendencias que surjan en los mercados origen.

4.Datocracia

Hasta ahora nos enfocábamos en posicionamiento y estadística, ahora la clave de la competitividad del destino se encuentra en datos que nos permiten saber lo que está pasando en origen, donde están nuestros clientes. Con las herramientas de marketing existentes podemos conocer mejor a nuestro cliente, saber qué demanda, buscar nuestros atributos y ofrecérselos de forma clara y directa. Actualmente no trabajamos con un único perfil de cliente sino millones, y nuestro destino puede diseñar productos específicos para cada uno de ellos.

5.Influencia en la conectividad

Tenemos que ganar peso y protagonismo en la conectividad aérea del destino. Actualmente dependemos demasiado de la capacidad aérea de los grandes turoperadores, que lógicamente dirigen sus operaciones a un destino u otro según su estrategia de negocio. La única forma de ganar influencia en la conectividad es que los actores que generamos el destino entendamos que somos quienes creamos la demanda aérea y que debemos y podemos tomar un papel más protagonista en la comercialización de esas plazas que generamos y operar aquellas rutas que entendamos que necesiten crearse o reforzarse.

6.Formación

Ahora, con la mayoría de empleados del sector turístico desocupados, es importante aprovechar el momento para invertir en formación, permitiendo de esta forma regresar con los equipos más preparados que nunca. La capacitación de las personas es piedra angular de cualquier proyecto de transformación y especialmente en uno en el que la tecnología es el catalizador. Casi la totalidad de los puestos de trabajo van a transformarse en los próximos años a la misma velocidad que aparecen nuevos.

7.Promoción inteligente

Una de las principales líneas de actuación de esa estrategia público-privada pasa por canalizar los recursos en marketing digital de instituciones públicas y empresas privadas para generar una inteligencia de cliente en origen del destino que tenga la capacidad de generar una promoción eficiente y rentable que entienda en tiempo real qué está pasando en cada mercado y qué atributos de nuestra oferta hay que potenciar en cada momento para persuadir a cada perfil de viajero, aprovechando tecnologías de Big Data e inteligencia artificial.

Se trataría de una inteligencia del turista en origen accionable que permita a todos los actores que conforman la cadena de valor conectar directamente con sus potenciales clientes de una manera más eficiente y les permita más autonomía desde la capacidad de venta directa de sus experiencias.

8.Inversión de Fondos Europeos

Es importante estar preparados para cuando lleguen las ayudas desde Europa, teniendo bien definido el reparto de recursos y sin perder de vista las directrices que exigen esas ayudas: digitalización, innovación y sostenibilidad. Debemos articular cuanto antes esos vehículos de co-gobernanza privado-publico que permitan la correcta ejecución de los proyectos que realmente puedan sean transformadores de nuestra industria y tractores de nuestra economía.

9.Rentabilidad de los recursos

En un momento de crisis como éste es necesario que cada euro invertido revierta en la máxima rentabilidad tanto desde la perspectiva económica como social. Para eso es necesario un ejercicio de co-responsabilidad en el que lo público entienda que esas inversiones deben responder a unos objetivos claros de rentabilidad y que todo el tejido empresarial entienda que sus objetivos no pueden ser exclusivamente económicos.

10.Hub de innovación turística

Canarias tiene ante sí la oportunidad de convertirse en un hub de innovación turística mundial, que como plataforma tricontinental y desde su Régimen Económico y Fiscal potencie la creación de toda una industria del conocimiento y la innovación paralela que nazca al amparo de la industria turística y que, desde ahí, explore los retos de la nueva economía digital. Tenemos el talento y van a llegar los recursos, con lo que podríamos cimentar las bases de una industria turística que no sólo dependa de la ocupación de sus hoteles sino que pueda beneficiarse del éxito de otros destinos gracias a la exportación de soluciones tecnológicas y know how.