El candidato de Coalición Canaria (CC) a la Alcaldía de La Laguna, José Alberto Díaz, avanzó ayer las propuestas que los nacionalistas plantean para los barrios de Camino La Villa y San Lázaro. El actual alcalde lagunero afirmó que se trata de dos zonas en las que "trabajamos duro para que cada lagunero y lagunera se sienta identificado con su municipio, viva donde viva, y se ilusione con el proyecto que queremos para el futuro, con los mismos servicios y las mismas oportunidades".
En concreto, para el barrio de Camino La Villa, el candidato propuso un plan de mejora que se centrará en facilitar la movilidad, la accesibilidad e implantar señalética indicativa; proceder a un plan integral de asfaltado y cambio del mobiliario público, así como la colocación de nuevos módulos infantiles en el parque de la calle Tamarco como se hizo recientemente en la calle Mencey Isora. Además, el candidato nacionalista recordó que "nuestro compromiso es apoyar las iniciativas vecinales que se planteen desde el barrio, así como proceder al cerramiento de la cancha cubierta del CEIP Camino La Villa, que actualmente se encuentra ya proyectada y cuyo expediente se está tramitando para su licitación".
En cuanto a San Lázaro, el nacionalista aseveró que "una de nuestras preocupaciones es mejorar la calidad de vida de los vecinos de San Lázaro. Por este motivo, nuestro compromiso es apoyar las iniciativas ciudadanas, además de llevar a cabo un plan de embellecimiento de los espacios públicos del barrio, el asfaltado de diferentes calles, la mejora de pluviales y la mejora de la movilidad". Además, "entre las acciones más importantes que hemos llevado a cabo en este mandato se encuentra la construcción y puesta en funcionamiento del Centro Ciudadano de San Lázaro, una infraestructura muy demandada por los vecinos. De cara al futuro, llevaremos a cabo una inversión para la mejora del Monumento de la Trilladora", enumeró.
El candidato de CC aseguró que "cuando hablamos de los barrios de El Coromoto, de Camino La Villa y de San Lázaro nos viene a la mente la riqueza rural y la marcada identidad de sus gentes a la tierra. Una tradición que sus habitantes mantienen con orgullo y que, al mismo tiempo, no dejan a un lado su convencimiento de formar parte de la nueva La Laguna del siglo XXI".
