El PSOE logró ayer una clara y rotunda victoria en las elecciones europeas, al conseguir 20 de los 54 escaños en liza en España, gracias a los más de siete millones de sufragios obtenidos, que suponen el 32,84 por ciento de los votos.

El PP, que había ganado estos comicios desde 2004, quedó en segunda lugar en esta ocasión, con 12 escaños, cuatro menos que en 2014, pese a haber conseguido cuatrocientos mil votos más que hace cinco años.

Los populares logran cinco eurodiputados más que Ciudadanos, que se aupa a la tercera posición con siete escaños y más de dos millones setecientos mil apoyos, el 12,17% de los votos, dos millones más que en las elecciones de hace un lustro.

En cuarto lugar se sitúa la coalición Podemos e Izquierda Unida, con seis escaños, gracias a los dos millones doscientas mil papeletas, el 10,05% de los votos. Este resultado queda lejos de los once eurodiputados que, por separado, sumaron en las elecciones de hace cinco años Podemos e Izquierda Unida.

Desde Unidas Podemos, su cabeza de lista, María Eugenia Rodríguez Palop, señaló que su formación hubiera deseado un mejor resultado y achacó el mal dato, "al efecto arrastre" del PSOE al que "le ha favorecido tener el control de las instituciones".

Vox, que obtiene un millón de papeletas más que en 2014, es la siguiente formación que estará representada en el Parlamento Europeo al lograr tres escaños y el 6,20% de los votos.

Si hace cinco años la sorpresa la dio Podemos con sus cinco escaños, en esta ocasión han sido las fuerzas independentistas catalanas, que logran ese mismo número de escaños, tres Ahora Repúblicas y dos Junts, sumando entre ambas casi dos millones trescientos mil sufragios.

La sexta fuerza política en el conjunto nacional -en las europeas toda España es circunscripción única- ha sido la coalición Ahora Repúblicas, que agrupa a ERC, Bildu y BNG. Su 5,62 por ciento de apoyos y 3 escaños prácticamente igualan las cifras que obtuvieron en 2014, entonces iban en candidaturas distintas.

La candidatura de Puigdemont obtuvo más de un millón de votos, de ellos 978.637 en Cataluña. JxCat concurrió en solitario y no en coalición con otras fuerzas nacionalistas como es habitual en las elecciones europeas, precisamente por ser de circunscripción única.

Por su parte, CEUS, la coalición de la que forma parte CC-PNC, ve reducidos sus apoyos en más de doscientos mil sufragios y también el número de representantes, al pasar de tres a uno, lo que impide la entrada en el Parlamento Europeo del candidato canario Luis Padilla.

En estos comicios ha descendido la cantidad de formaciones que tendrán voz en la Eurocámara, ya que en la elecciones de 2014 fueron diez los partidos que sacaron escaños y en la jornada electoral de ayer se han visto reducidas a ocho.