Los resultados de las elecciones del domingo han dejado un escenario en Canarias con cuatro pactos posibles, que obligan a los partidos a una intensa negociación, para la que algunos anuncian que no pondrán "líneas rojas", aunque la realidad es que ya las han puesto... y muchas.

Canarias estrenaba este domingo un Parlamento ampliado de 60 a 70 diputados, con topes rebajados para facilitar el acceso de nuevas opciones políticas y con dos urnas para elegir la misma Cámara, un caso sin precedentes en el resto del país, donde ahora se necesitan 36 diputados para tener la mayoría e investir a un presidente.

El resultado de las generales hizo a la izquierda acariciar un escenario en el que fuera posible conformar en las islas un pacto sin Coalición Canaria, inspirado en el que ha gobernado el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria los últimos cuatro años (PSOE-NC-Podemos), con estabilidad y un balance económico de lo más ortodoxo: la capital grancanaria es de las pocas grandes ciudades del país que han conseguido dejar a cero su deuda financiera.

Sin embargo, el hundimiento de Podemos, que ha perdido la mitad de los electores que confiaron en su programa en 2015 y tres de sus siete diputados, hace que ese pacto se quede en 34 escaños.

En el nuevo escenario, hay cuatro pactos matemáticamente posibles: PSOE-Nueva Canarias-Podemos más la Agrupación Socialista Gomera (37 diputados), Coalición Canaria-PP-Ciudadanos y, de nuevo, la ASG (36), PSOE-CC (45) y PSOE-PP (36).

Los candidatos del PSOE, Ángel Víctor Torres, y CC, Fernando Clavijo, ya han anunciado que abrirán una ronda de conversaciones para explorar todas las opciones. Torres dice que no se pone líneas rojas y Clavijo solo marca una, la de no gobernar con Podemos.

Pero la mesa de la negociación hará aflorar varias más y los partidos deberán enfrentarse a algunas de las declaraciones más taxativas que hicieron durante la campaña. Estas son algunas:

NO GOBERNAREMOS CON COALICIÓN CANARIA

Es la promesa electoral de Podemos, que tiene su contrapunto en el veto que a su vez le pone CC al partido morado. Pero lo de "no gobernaremos con Coalición" también ha estado en la boca del candidato socialista, de forma más o menos explícita. Torres ha prometido "cambiar Canarias" y quitar del Gobierno a quienes responsabiliza de haber llevado a las islas a los peores datos del país en paro, salarios bajos, precariedad laboral, pobreza y listas de espera sanitarias y nivel de atención a la dependencia.

Cuando en algún debate los demás candidatos le han apretado al respecto, Torres le ha introducido una palabra más a esa frase, en lo que sonaba a no cerrarse puertas: "No pactaremos con 'esta' CC".

Sin embargo, si el pacto por la izquierda resulta inviable o si Pedro Sánchez necesita los votos de las dos diputadas de CC en el Congreso, el PSOE tendrá que enfrentarse a esa línea roja y decidir.

NO GOBERNAREMOS CON PODEMOS

Es la máxima de Coalición Canaria, pero se infiere también de algunas declaraciones de Casimiro Curbelo, el líder de la Agrupación Socialista Gomera (ASG), uno de los grandes triunfadores del domingo, porque parece clave para la gobernabilidad de Canarias.

Curbelo no ha sido tan tajante como Coalición Canaria al respecto, pero también ha expresado sus recelos sobre Podemos.

¿Puede poner eso en cuestión el posible pacto de toda la izquierda y decantar a la ASG hacia una alianza con CC y PP, la misma que ha aprobado los últimos dos presupuestos de Fernando Clavijo y le ha permitido terminar la legislatura en minoría?

SE ACABARON LOS PACTOS EN CASCADA

En pasadas legislaturas, ha sido común que Coalición Canaria acordara unas veces con PP y otras con el PSOE gobernar juntos no solo el Gobierno de Canarias, sino también todos aquellos cabildos y ayuntamientos donde sumaran mayoría absoluta.

Ello les ha provocado muchos quebraderos de cabeza, en particular al PSOE, que ha visto como CC promovía mociones de censura contra sus alcaldes sin consecuencias para sus promotores, mientras que los socialistas expulsaban del partido a los concejales que habían hecho lo propio contra alcaldes nacionalistas.

Algunos dirigentes de CC han dicho ya que esos pactos "se acabaron", que cada institución es diferente. ¿Pero será viable un Gobierno de Canarias de PSOE y CC sin que se traslade, por ejemplo al Cabildo de Tenerife, feudo de los nacionalistas, u otro de PSOE y NC sin que esta última fuerza siga presidiendo el Cabildo de Gran Canaria, su administración más importante?

Y esa línea roja tiene otra derivada: ¿Qué pasará con la candidata socialista a alcaldesa de Santa Cruz Tenerife, Patricia Hernández, y su promesa de que "ningún voto del PSOE hará alcalde" de nuevo a José Manuel Bermúdez si la alianza PSOE-CC sale adelante?

NO APOYAMOS LA INVESTIDURA DE IMPUTADOS

Esa es la máxima de Ciudadanos y puede condicionar la investidura de Fernando Clavijo, investigado en el llamado "caso Grúas" por decisiones que tomó durante su etapa como alcalde de La Laguna, si las negociaciones decantan la balanza hacia el centroderecha.

La candidata de Cs, Vidina Espino, ha dicho en las últimas horas que cree en la inocencia de Clavijo, pero que el no investir como presidente a alguien investigado judicialmente es un principio fundamental de su partido. Si la alianza CC-PP-Cs-ASG prospera, ¿renunciará Cs a esa línea roja o estará CC dispuesta a sacrificar a su líder más claro y reconocido, como permiso de Ana Oramas?

NO ES NO

Es una de las citas más célebres de Pedro Sánchez. Se acuñó cuando el PSOE se debatía sobre si facilitar o no la investidura de Mariano Rajoy y socialistas de toda España la han repetido después, en una especie de veto preventivo contra el PP.

El líder de los populares en la islas, Asier Antona, ya ha dicho que él sí está dispuesto a conversar con todos sobre un posible Gobierno, incluido con el socialista Torres. Hay quien habla ya por ello de un posible pacto "a la vasca", pero para buscar precedentes de pactos entre PSOE y PP no hay que remontarse a los tiempos del lehendakari Patxi López. Asier Antona tiene su propia experiencia.

Cuando dirigía el PP de La Palma, el actual presidente de los populares ya llegó a un acuerdo con el PSOE que desbancó del Cabildo de esa isla a CC. Y no les fue mal a ninguna de las dos partes: el socialista Anselmo Pestana consiguió luego revalidar su mandado y Antona empezó a forjar su carrera hacia el lugar que ahora ocupa.

NO PACTAREMOS CON VOX

Ni falta que hace. Tanto el PSOE como CC prometieron en campaña no apoyarse en el partido de Santiago Abascal; en el caso de los socialistas, por ver en su programa casi la antítesis de su credo político; y en el de los nacionalistas, por su profundo cuestionamiento de las comunidades autónomas.

Pero no hará falta. Los electores de Canarias le han dado a Vox un sonoro portazo: sus representantes no se sentarán ni en el Parlamento de Canarias, ni en ninguno de sus siete cabildos ni tampoco en ninguno de los 88 ayuntamientos de las islas.