El manual delcandidato de Cicerón

El Commentariolum petitionis, (Manual sobre la campaña electoral), se conoce como uno de los escritos electorales más completos y rigurosos de la historia. Su autoría ha suscitado cierta polémica, pero la mayoría de los historiadores creen que fue redactado por Quinto Tulio Cicerón, hermano del célebre político, filósofo y orador romanoMarco Tulio Cicerón, quien nació en una familia plebeya de la orden ecuestre, se formó en literatura y retórica y prestó servicio militar. Poco después obtuvo un gran prestigio como abogado y, tras ser cuestor en Sicilia en el 75 a.e.c. y pretor en el 66 a.e.c., decidió presentar su candidatura como cónsul.

Quinto escribió las seis páginas de las que consta el manuscrito en el 64 a.e.c. de cara a la convocatoria electoral a la que se presentaba su hermano. Su propósito fue mostrarle ante la opinión pública como un hombre virtuoso. Del texto se puede sacar en claro que la política ha cambiado muy poco en ciertos aspectos y sorprende por su actualidad. Sus consejos servirían a cualquier político para convencer y manipular a los votantes por su profundo conocimiento del alma humana.

En la misiva, Quinto aconsejaba a su hermano sobre lo que debía decir, de qué manera tenía que dirigirse a los electores y señalaba las debilidades de sus adversarios políticos. Lo alentaba también a rodearse de personas leales y a acudir a aquellos personajes influyentes a los que había prestado favores anteriormente para pedirles apoyo, lo que vendría a ser actualmente tráfico de influencias.

En uno de los puntos recomendaba a su hermano que se negara amablemente a realizar promesas que no podía cumplir, pero le recordaba que era mejor una promesa incumplida que negarse a aceptar una petición de alguien que representase un apoyo importante para su candidatura. También le advertía de que los hombres se dejaban seducir por el aspecto y por las palabras antes que por la realidad de su propio beneficio.

Quinto ideó, además, un lema personal: Novus sum, consulatum peto, Roma est (Soy un hombre nuevo, aspiro al consulado, Roma es mi ciudad). Cicerón se midió con seis rivales, entre ellos Lucio Sergio Catilina a quién consiguió eclipsar sin problemas durante sus exposiciones. En el Commentariolum el autor describió a un Catilina despreciable, sin miedo a nada y capaz de hacer cualquier cosa, por inmoral que fuese, para conseguir sus propósitos. También lo acusaba de haber derramado la sangre de ciudadanos romanos mientras servía al dictador Sila y animaba a su hermano a hacer públicos estos aspectos con el fin de desprestigiar a su contrincante.

Los consejos de Quinto funcionaron y Marco Tulio terminó siendo elegido cónsul. Además, pasó a ser un homo novus, expresión con la que se designaba a los hombres que eran los primeros de su familia en acceder al Senado romano en calidad de cónsul. Los estamentos de poder estaban tan restringidos que, por norma general, solo tenían acceso a él los patricios. Cicerón es un buen ejemplo de esta limitación, ya que fue el primer homo novus nombrado en treinta años.

Para algunos expertos como el profesor e investigador Pablo Vicente Sapag, el manual tiene contenidos que pueden ser aplicables a la política actual, pero solo en lo que respecta a la comunicación de masas. En la República romana los políticos no estaban respaldados por grandes publicistas ni asesores como sucede ahora, ni tenían la facilidad de llegar a los electores gracias a los medios de comunicación. Debían ganarse sus apoyos mediante su retórica y sus argumentos, por lo que era esencial mostrar una buena oratoria y carisma, tal como hizo Cicerón.

Suscríbete para seguir leyendo