El diputado electo de Unidas Podemos (UP) por la provincia de Santa Cruz de Tenerife, Alberto Rodríguez, responsabilizó anoche al presidente en funciones, el socialista Pedro Sánchez, de "la irrupción de la extrema derecha en Canarias" gracias a la repetición de las Elecciones Generales. Tras la valoración que realizó el líder nacional de la fuerza morada, Pablo Iglesias, cuando ya el escrutinio no iba a mover ninguna ficha en el colorido mapa del próximo hemiciclo, el tinerfeño señaló a Sánchez como el único culpable del ascenso de VOX, el partido de extrema derecha que dirige Santiago Abascal y que hasta la fecha no había obtenido representación en Canarias para estar presente en las Cortes.

Rodríguez señaló que "la mayor evidencia" de esta jornada electoral es que "ha servido para que, en primer lugar, mucha gente de todo el espectro político se haya quedado en casa y no haya ido a votar y, por otro lado, que se haya producido una irrupción de la extrema derecha", que consideró "dramática" porque dijo "es de las más potentes de Europa y ha entrado en Canarias cuando hasta el día de hoy, afortunadamente Canarias era un territorio libre de ultraderecha, libre de racismo, libre de machismo y de homofobia, pero ahora tenemos a dos representantes canarios de VOX en las instituciones españolas", avanzó para añadir que "es un auténtico drama".

A pesar de lo anterior, Alberto Rodríguez consideró que "aún dan los números y sigue existiendo la posibilidad sobre la mesa para hacer un Gobierno de coalición progresista" en el país. Recordó que tras el 28 de abril había números para llegar a un acuerdo para no forzar la convocatoria de estas elecciones.

Sin embargo, y a pesar de los resultados a la baja para ambas formaciones de izquierda, Rodríguez señaló que "seguimos tendiendo la mano al Partido Socialista" y a Pedro Sánchez le indicó que "ya es hora de que asuma la realidad, el resultado electoral y la aritmética parlamentaria".

Aseguró que si Sánchez quiere tener un gobierno progresista "no le queda otra" porque la otra alternativa posible "es un Gobierno de gran coalición entre el Partido Socialista y el Partido Popular", un Ejecutivo del que consideró que la base electoral progresista "no estaría muy contenta; creo que no se lo perdonaría nunca".

Rodríguez auguró que, si las dos formaciones mayoritarias, PSOE y PP, llegan a un acuerdo "continuarán las políticas de austeridad y de recortes que tanto daño han hecho al país y a las clases medias y trabajadoras".

El diputado electo de UP insistió en la idea de que "un Gobierno de coalición progresista es posible como el que ya disfrutamos en el Archipiélago canario" y cuyos frutos "disfrutamos".

A preguntas de los periodistas, Rodríguez valoró que la entrada en el Congreso de Más País, la formación que lidera Íñigo Errejón, con tres diputados junto a Compromís, confirman "las matemáticas de las fuerzas progresistas" que evidencian que la fragmentación de fuerzas progresistas ha hecho que en muchas provincias, con el reparto de votos, se hayan quedado sin representación. "Es una realidad, no una opinión; no es más que un hecho empírico demostrable", destacó.

A la pregunta de si creía que el PSOE estaría ahora más interesado en llegar a un acuerdo con UP para evitar una nueva repetición electoral y un más que posible ascenso de las derechas, Alberto Rodríguez aseguró que "después del 28 de abril pensé que podríamos alcanzar un acuerdo y no llegar a repetir las elecciones, pero me equivoqué. Me parecería un auténtico disparate que Sánchez, después de que el PSOE haya perdido casi un millón de votos, forzara a todo el país a unas terceras elecciones en menos de un año".

Además, Rodríguez señaló que "si este 10-N ha habido ya un importante número de personas que se han quedado en casa sin ir a votar, fruto del hastío, la indignación y la frustración, no quiero imaginar el escenario dentro de unos meses" y añadió que confiaba en que Sánchez "haya aprendido la lección".

El diputado de la formación morada sostuvo que ahora "hay un Parlamento mucho más fragmentado y el Partido Socialista tiene menos posibilidades de las que tenía encima de la mesa tras el 28 de abril ante el hundimiento ahora de Ciudadanos", afirmó.