La macroencuesta electoral del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) con vistas a los comicios del próximo 10 de noviembre da la victoria al PSOE, por encima de sus 123 diputados del mes de abril.

Ese 32,2% que el CIS otorga al PSOE supone un aumento de cuatro puntos respecto a las elecciones del 28A, pero está por debajo de la encuesta de septiembre, donde las perspectivas eran más favorables y se le otorgaba un 34,2%.

El PSOE es también el partido con mayor intención de voto ya declarada, con un 19,9% de voto decidido frente al 9,1% del PP o el 7,4% de Unidas Podemos.

La subida respecto a las generales se traduce en una horquilla de entre 10 y 27 escaños más y con ello, según los cálculos del organismo presidido por José Félix Tezanos, los socialistas ya podrían gobernar con mayoría absoluta tanto con Unidas Podemos como con Ciudadanos, sin necesidad de recurrir a más socios.

La encuesta se basa en 17.650 entrevistas personales realizadas en 1.091 municipios de las 50 provincias entre el 21 de septiembre y el 13 de octubre, es decir tras el visto bueno del Supremo a la exhumación de Franco y el aniversario del referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017, pero sin conocerse aún la sentencia sobre el procés y la reacción violenta de una parte del independentismo en Cataluña tras publicarse la condena a los líderes independentistas.

La segunda posición vuelve a ser para el PP, al que se calcula un apoyo del 18,1 por ciento, lo que supone una escasa subida de 1,4 puntos, y un grupo parlamentario de entre 74 y 81 diputados, mejor que los 66 de abril, pero lejos de la cifra de cien escaños que le dan las encuestadoras privadas.

La coalición Unidas Podemos se quedaría en una posición similar a la de los anteriores comicios sumando el 14,6% por ciento y entre 37 y 45 escaños. Esos datos incluyen a En Comú (2,6% y ocho o nueve diputados en Cataluña) y a Galicia En Común (0,9% y dos o tres diputados en Galicia).

Ciudadanos, por su parte, cae y pasa a ser tercero con una estimación de voto del 10,6% (cinco puntos por debajo del 15,86% de abril) y entre 27 y 35 diputados, lo que supone perder hasta 30 escaños respecto a los 57 que logró en los anteriores comicios.

En ese contexto, el CIS entiende que el PSOE podría llegar a sumar mayoría absoluta (176 votos) tanto con Unidas Podemos, ya que juntos sumarían entre 160 y 183 diputados, como con Ciudadanos (entre 160 y 185 escaños).

La quinta plaza volvería a ser para Vox, pero, en contra de lo que indican las encuestas privadas, el CIS pronostica a los de Santiago Abascal una caída respecto al mes de abril otorgándoles ahora un respaldo del 7,9% y entre 14 y 21 diputados frente al 10,26% y 24 diputados de las generales de abril.

Por su parte, Más País, el nuevo partido de Íñigo Errejón, entraría en el Congreso con el 2 por ciento y dos escaños en Madrid, a lo que se añadiría el 0,9% de su socio valenciano Compromís, con uno o dos escaños más.

Por bloques, la izquierda abre brecha respecto al equilibrio que hubo en las generales del abril y ahora en la macroencuesta del CIS la suma de PSOE, Unidas Podemos, Más País y Compromís se impone claramente con casi la mitad de los votos y entre 173 y 199 escaños, frente al 37% y los entre 117 y 139 diputados que se adjudican a PP, Ciudadanos, Vox y Navarra Suma.

La CUP entra en el Congreso

Entre los partidos de ámbito territorial, Esquerra Republicana (ERC) mantiene el liderazgo en Cataluña subiendo hasta el 4,4% y entre 16 y 18 diputados, y lejos queda Junts per Catalunya con el 1,8% y entre cuatro y seis escaños, mientras que irrumpe la CUP con un 0,6% y entre uno y dos escaños.

En Euskadi, el PNV se mantiene con el 1,5% y seis o siete diputados, mientras que a Bildu se le da el 1,2% y suben a cinco escaños. El CIS no da por seguro el escaño del PRC de Miguel Angel Revilla y pone en riesgo los dos escaños actuales de Coalición Canaria.

En una nota metodológica para explicar su 'cocina', el CIS explica que este barómetro es un diagnóstico de una "foto fija" de las dinámicas que experimenta el electorado y, por tanto, "no es en absoluto un modelo de pronóstico de los resultados de las elecciones" del próximo 10 de noviembre porque no se puede evaluar el efecto de las campañas electorales en el sentido final de voto.