El sector ornamental ha sido sin lugar a duda el sector agrario más perjudicado por esta situación generada por el Covid-19, lo que provocó al principio de esta situación que se cerrasen todos sus canales de comercialización viéndose obligado a retirar muchos de sus productos en uno de los principales períodos del sector de flores y plantas, la primavera, y perder campañas tan importantes como el Día del Padre, la Madre, las Cruces, Alfombras Florales, bautizos, bodas y otros muchos eventos dados en este período.
No obstante, los agricultores han seguido apostando por su actividad, produciendo sin saber si en cualquier momento la situación de la pandemia podría o puede volver a cerrar la comercialización. Desde la finalización del estado de alarma el sector ornamental ha ido recuperando su actividad comercial, recuperando a la mayoría de sus trabajadores en ERTE, aunque también dentro del propio sector hay subsectores más afectados que otros, en este caso la flor cortada ha sido sin duda el más afectado ya que sus canales de comercialización dependen más de la actividad turística, canal Horeca, y eventos en torno a estos dos canales.
Por otro lado, se están viendo los resultados del trabajo realizado al principio de esta difícil situación mediante la valoración de pérdidas generadas que se han convertido en líneas de ayudas directas al sector, por lo que se prevé acabar el año con un apoyo institucional importante para poder continuar con la actividad con mayores garantías. El Cabildo de Tenerife fue el primero con la Ayuda a Insumos y a la campaña de promoción, y en los próximos días y semanas se confirmarán las ayudas de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca del Gobierno de Canarias, la del Ministerio de Agricultura, y la de otros Cabildos como el de Gran Canaria y La Palma, incluso la del Ayuntamiento de La Laguna para los agricultores de ese municipio.
Es importante que el producto de las flores y plantas sea considerado como producto esencial, y más ahora cuando por otro lado se está estableciendo toda una maquinaria administrativa y funcionarial para implantar políticas verdes que ayuden a luchar contra el cambio climático. Las flores y plantas son filtros del aire, aportan oxígeno y son auténticos equilibradores de nuestra sostenibilidad ambiental, es importante que los políticos entiendan esta función y de ahí su condición de esencial.
La recuperación del sector en los últimos meses ha sido en parte debido a esta necesidad visualizada por los residentes canarios, la necesidad de oxigenar hogares y casas en donde han estado tanto tiempo confinados, que ha tenido como consecuencia un aumento de estos productos en el consumo local de los residentes que han suplido la falta de otros canales de comercialización locales antes mencionados (turismo y Horeca).
También es de agradecer el apoyo de los municipios en el mantenimiento de la apertura de los cementerios, los cuales se han convertido en estos meses atrás en la principal salida de la flor cortada local. El sector salvó la campaña del Día de Todos los Santos, que aunque no se facturó igual que otros años, por lo menos se sacó casi la totalidad de la producción local, algo impensable meses atrás, lo que ha supuesto una inyección importante de moral para los agricultores.
Ahora toca la campaña de navidad con la Flor de Pascua como la protagonista de la misma, con el conocimiento de que existen todavía algunos canales de comercialización cerrados, pero el sector apela al apoyo de los canarios para salvar esta campaña. Los agricultores llevan desde mayo invirtiendo en este cultivo, hay que ser optimistas y esperar que la campaña sea con éxito, y pensar que no se volverá en ningún caso a un confinamiento de esta actividad.
También el sector está muy preocupado con la exportación de sus productos, sobre todo con la aérea, la cual se está viendo afectada por la crisis del turismo generada por la Covid-19, la disminución del tráfico aéreo y el desorbitado incremento de los costes del transporte, que están poniendo en peligro la exportación de proteas y de aromáticas, lo que ha obligado a estudiar otras vías, pero de difícil desarrollo por el volumen de las producciones.
Este año ha sido sin lugar a dudas el más duro para esta actividad agrícola, pero son en estos momentos donde el trabajo de Asocan debe notarse y con el apoyo de todos los asociados el sector ha conseguido resistir y espera que a partir de ahora termine de recuperar la actividad. Son muchos los frentes abiertos, pero sus miembros están preparados y son optimistas con respecto al futuro.
Con respecto a la jardinería, también ha sido un año muy complicado con los hoteles cerrados, uno de sus principales clientes de la jardinería privada, pero también se han abierto muchas posibilidades de futuro con la denominada Estrategia de Infraestructura Verde que se ha establecido desde la UE, la cual este sector debe intentar desarrollar para su profesionalización y la viabilidad del mismo ante el gran enemigo, el intrusismo ilegal.
