Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

La temporada alta canaria gana 2,5 millones de plazas aéreas desde la pandemia

La excepción negativa del mercado nórdico queda en anécdota por las intensas alzas que registran el británico, el peninsular, el italiano o el francés

Actividad registrada ayer en el entorno del ‘stand’ de Canarias durante la segunda jornada de la WTM de Londres.

Actividad registrada ayer en el entorno del ‘stand’ de Canarias durante la segunda jornada de la WTM de Londres. / NACHO GONZÁLEZ

Julio Gutiérrez

Julio Gutiérrez

Las Palmas de Gran Canaria

«Con la conectividad empieza todo». La sentencia, pronunciada el martes durante la jornada inaugural de la 44ª World Travel Market (Feria Internacional de Turismo de Londres) por el presidente de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Las Palmas (FEHT), José María Mañaricua, no deja lugar a dudas: sin plazas aéreas no hay turistas ni, por lo tanto, negocio. Sensu contrario si las rutas y frecuencias incluidas en las operativas diseñadas por las aerolíneas crecen, también lo hacen los resultados. El último invierno no afectado por la pandemia –temporada alta 2018-2019– la oferta para viajar al Archipiélago estuvo integrada por 8,14 millones de asientos; la de este año tiene 10,71 millones más.

Esa diferencia de 2,5 millones de plazas aéreas explica por sí sola la colección de récords de llegadas de turistas que exhibe el negocio alojativo canario durante los últimos años. En términos relativos, el crecimiento durante los últimos siete años alcanza el 31,5%. Un avance que tiene como único borrón el retroceso del mercado nórdico –Dinamarca, Noruega, Suecia y Finlandia–, muy importante para islas como Gran Canaria que, sin embargo, ha sido cubierto con creces por otros.

La marcha de Norwegian

Lo ocurrido con los turistas que viven más al norte del continente europeo tiene mucho que ver, aunque no todo, con el retroceso acometido por la compañía aérea Norwegian, que llegó a situarse entre las más importantes de las que operaban en el Archipiélago, incluso mordiendo un trozo considerable de la tarta del negocio de los vuelos a la Península. La irrupción de la pandemia de coronavirus la cogió ya con el paso cambiado y funcionando a medio gas en las Islas en comparación con los años inmediatamente anteriores. En los meses finales de aquel 2020, la llegada al punto de quiebra era la opción más barajada; desde luego se contaban con los dedos de las manos quienes consideraban que aún le quedaba músculo para salir de un agujero que se adivinaba profundo, casi abismal.

Cinco años después, no sin un considerable empujón público, la compañía vuelve a repartir dividendos entre sus accionistas. Lo que nunca se recuperó fue el grado de conectividad que tuvo con las Islas. A este hecho se sumaron las dudas económicas de los últimos años, con tasas de inflación elevadas, la recuperación de destinos algo más alejados que Canarias pero que son tradicionales destinos para los nórdicos -Egipto, por ejemplo- y las corrientes ambientalistas que ponen la mira en el transporte aérea cuando se analizan las emisiones de carbono.

Suecia, a la cabeza

La pérdida de plazas áereas con esos cuatro países llega hasta las 191.164 (-31,5%), con Suecia como gran protagonista al concentrar el 54,8% de ellas. Por contra, Noruega se erige en el pilar nórdico más sólido al haber cedido tan solo un 4% (-5.740 asientos) desde la temporada invernal 2018-2019.

En cualquier caso, esa pérdida que habría sido inquietante en otro tiempo se reduce a la mera anécdota solo con el impulso que ha cobrado la llegada de visitantes desde Reino Unido. En la capital británica permanecen en estos días alrededor de 150 empresas del Archipiélago, en su mayoría privadas, para afianzar los lazos que han convertido al destino en una absoluta predilección para los británicos. Al contrario de lo temido, tras el Brexit su ritmo de llegada no amainó. Hoy las aerolíneas les ofertan 910.000 butacas más para escapar del frío por unos días que antes de desatarse la crisis sanitaria. Un incremento del 38,8% que se concreta en un total de 3,25 millones de plazas durante la temporada de invierno recién estrenada.

Península

Las oferta para conectar con la Península también crece hasta el tercer escalón (31,6%) en el mismo tiempo y alcanza los 2,54 millones de asientos. Es el otro gran avance de entre los principales mercados, que también cuentan al alemán entre los que avanzan, aunque de manera menos notoria (5,4%). No obstante, que los germanos tengan hoy 90.000 asientos más para llegar al Archipiélago tiene importancia. Antes de la pandemia, cualquier eventualidad económica como pueden ser la inflación o el decrecimiento del PIB germano se traducía en una huida en masa.

El mayor espectáculo lo ofrecen los tres mercados que conforman el club de los siete: Irlanda, Italia y Francia. El estallido de la Primavera Árabe, sobre todo en el caso de los dos últimos, les llevó a contemplar las Islas como posibilidad para pasar las vacaciones y esa mirada accidental se fue tornando en interés cierto. Tanto es así que la oferta para trasladarse a Canarias ha crecido en todos los casos por encima del 70%; el 78,9% en el caso de Irlanda; 78,3%, en el de Italia, y 70,5%, en el de Francia. Los de la península de la bota tienen a su disposición esta temporada alta 460.464 butacas; los del trébol, 429.160, y los galos, un total de 328.644.

Con los grandes del sector

Por otra parte, la Consejería de Turismo de Canarias se reunió ayer en la World Travel Market con los principales operadores turísticos internacionales para abordar la puesta en marcha de estrategias que desemboquen en la regeneración del destino. Frente al equipo de Jéssica de León se sentaron directivos de TUI, Iberostar, Expedia, easyJet Holidays, Carnival UK, ABTA, Travalyst o The Travel Foundation, entre otros.

«La colaboración público-privada resulta esencial para que las Islas Canarias sigan siendo un destino de referencia mundial que garantice no solo una experiencia auténtica, única y de calidad para los visitantes, sino también un futuro sostenible para la región y su ciudadanía», aseguró la consejera De León tras la reunión. Junto a ella, acudieron el director general de Ordenación, Formación y Promoción Turística, Miguel Ángel Rodríguez, y el director gerente de Turismo de Islas Canarias, José Juan Lorenzo.

Impacto

El objetivo perseguido fue «articular fórmulas de cooperación» que permitan «elegir proyectos que se puedan desarrollar en el territorio para borrar la huella inevitable que deja la actividad turística en muchos de los espacios» que utilizan tanto los propios canarios «como los turistas», explicó Jéssica de León.

Turismo de Canarias transmitió a los operadores turísticos su propuesta de impulsar que empresas y viajeros participen directamente en proyectos de restauración ambiental en las Islas, como la reforestación de zonas afectadas por incendios, la regeneración de dunas y la protección de áreas costeras, así como en iniciativas de carácter social.

De León se sienta con los operadores internacionales para involucrarles en el cuidado del destino

De León resaltó la importancia de que los principales actores turísticos se sumen al cuidado del destino. «Hemos dado un paso en firme que se convertirá en una gran alianza por el destino Islas Canarias, en la que el sector privado encontrará una fórmula para seguir colaborando en que nuestro Archipiélago encuentre en el turismo una herramienta que mejore la vida de la ciudadanía canaria», aseguró De León.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents