La vivienda vacacional se queda con la mitad de los nuevos turistas que llegan a Canarias
Los extranjeros alojados en inmuebles turísticos crecen un 54% el año pasado, nueve veces más que los que se hospedan en hoteles de las Islas

Turistas en un paseo marítimo del Archipiélago. / Europa Press
Nuevo récord turístico para Canarias. El Instituto Nacional de Estadística (INE) confirmó este lunes 3 de febrero lo que ya se venía apuntando desde hacía meses, otro máximo histórico en la llegada de extranjeros. El incremento respecto a 2023 ha alcanzado el 9,1%, lo que supone 1,2 millones de visitantes más. Pero esta tendencia al alza no se reparte igual en todos los tipos de alojamientos que se ofertan. La vivienda vacacional cada vez gana más terreno. El año pasado se quedó con casi la mitad de los turistas que sumó el Archipiélago y los huéspedes de este tipo de hospedaje superaron por primera vez los dos millones. De manera que en 2024 el número de personas que escogieron para su estancia en las Islas una casa turística creció un 54,3%, respecto a los datos de los doce meses anteriores.
Un crecimiento espectacular que parece imparable y que se hace todavía más evidente cuando se compara con la cantidad de alojados en los hoteles. Este tipo de oferta también crece pero no tiene comparación. El año pasado ofreció hospedaje a un 6,25% más de turistas hasta superar los 11 millones de viajeros. Aun así, siguen siendo la opción escogida por la inmensa mayoría de los extranjeros que vienen a Canarias, que el año pasado superaron los 15,2 millones. Es decir, los hoteles del Archipiélago alojan a siete de cada diez turistas que llegan al destino, mientras que las conocidas como ‘VV’ se quedan solo con el 13%. El resto de los viajeros que vienen a pasar unos días de vacaciones son dueños de un inmueble –374.816 de quienes vinieron a las Islas lo hizo para quedarse en su propia casa, una cantidad que apenas crece– o pasan unos días de descanso en domicilios de amigos o familiares.
Son datos que este lunes puso de manifiesto la Estadística de Movimientos Turísticos de Fronteras (Frontur), que confirmó las cifras que hace unas semanas ya había lanzado el Ministerio de Turismo. España cerró 2024 con un alza del 10% en el número de viajeros internacionales, llega a los 94 millones y recorta posiciones frente a Francia, el país con más turismo del mundo. Nunca antes tantas personas habían decidido pasar sus vacaciones en territorio español y la situación se repite en Canarias, que ha vivido el mejor año de su historia en términos turísticos, en lo que a los números se refiere. No solo hemos recibido 15,2 millones de visitantes extranjeros, sino que el desembolso que han realizado ha sido también mucho mayor. Así lo indica la Encuesta de Gasto Turístico (Egatur), que cifra la facturación en un total de 22.886 millones de euros, en el caso de Canarias. Una cantidad que supone un 12,5% más que lo gastado por los visitantes en 2023 y que eleva el desembolso medio por persona hasta los 1.503 euros, el segundo más alto del país.
Un incremento de la facturación que se situó bastante por encima de la inflación, aunque la escalada de los precios de los últimos años no haya sido ajena a las vacaciones y ahora haya que pagar bastante más que antes de la pandemia para seguir disfrutando de unos días de relax. El año pasado, el Índice de Precios de Consumo (IPC) cerró en un 2,2% en el caso del Archipiélago, mientras que el vinculado a los restaurantes y hoteles lo hizo en el 4,1%. Por lo que la crisis inflacionista no puede explicar del todo este incremento de la facturación y tanto el sector como las administraciones se congratulan de estar atrayendo a un visitante que está dispuesto a gastar más.
Respecto a los principales mercados emisores hay poca novedad. Reino Unido sigue erigiéndose como el país que envía un mayor número de visitantes, seguido de Alemania e Italia. Todas las nacionalidades van al alza y solo algunos países nórdicos como Finlandia o Dinamarca anotan pérdidas.
Esos 15,2 millones de turistas extranjeros –a los que habría que añadir los visitantes peninsulares que elevarían la cifra cerca de los 18 millones– hacen constatar que 2024 ha sido un año espléndido para el sector turístico en el Archipiélago en términos cuantitativos. Pero ahora el destino se enfrenta a la disyuntiva de no morir de éxito. El año pasado también fue un momento en el que las críticas y quejas por los efectos negativos que el turismo masivo causa en la calidad de vida de la población local, las infraestructuras, la vivienda o los espacios naturales cristalizaron en una parte de la población y se evidenciaron en dos manifestaciones multitudinarias. Un movimiento que ya ha tenido efecto respecto a la reputación del destino, como la recomendación que realizó la prestigiosa Guía Fodor´s de reconsiderar viajar a las Islas por el malestar que causa el turismo entre la población. A pesar de todo, el sector espera que en 2025 siga la tendencia al alza, aunque de forma más moderada, de acuerdo a los datos de conexiones aéreas y reservas para los próximos meses.
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