El inicio del ajuste en el sector público lleva al paro a 33.500 canarios más

En los tres primeros meses de este año, 33.500 canarios fueron al paro. La conjugación de lo que se asoma como el previsible ajuste del sector público, responsable de gran parte de la pérdida de puestos de trabajo entre enero y marzo, y un repunte de la población activa, con 19.900 incorporaciones al mercado laboral, propiciaron el aumento del desempleo (19,8%).

La Encuesta de Población Activa (EPA) publicada ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) deja, además, constancia de una notable divergencia interprovincial. Se destruyeron 13.600 empleos en el trimestre en el Archipiélago. Serían más de no haberse generado 2.400 nuevos en la provincia de Las Palmas. ¿Qué significa eso? La pérdida de 16.000 la de en Santa Cruz de Tenerife.

Unas diferencias que vuelven a observarse al detener el análisis en la evolución de la población activa. Mientras la provincia occidental, que cuenta con 551.900 personas trabajando o en paro pero queriendo encontrar un empleo, solo sumó 2.600 efectivos, en Las Palmas el mismo grupo creció en 17.200. Y mientras esta última tiene ahora que colocar a 30.100 personas más que hace un año si quiere reducir el paro, Santa Cruz de Tenerife cuenta con 6.400 menos.

Canarias cerró el mes de marzo con un total de 202.500 parados, el segundo número más bajo –solo mejorado por el del último trimestre del año pasado– desde que estalló la crisis de 2008. La tasa de desempleo creció 2,6 puntos hasta situarse en el 17,17%, y por vez primera desde los primeros años del presente siglo no es una de las tres mayores de España, al mejorar el registro de Baleares.

El Archipiélago cierra marzo con 202.500 parados, la segunda cifra más baja desde la crisis de 2008

En el país buscan empleo 3,12 millones de personas, el 13,26% de la población activa, tras sumar 103.800 parados (3,4%) en los tres primeros meses del año. Es decir, el porcentaje del repunte canario multiplica por más de cinco el del conjunto del país. Eso en el corto plazo, porque, sin embargo, durante el último año, el descenso del 13,6% (31.100 parados menos) es el mayor anotado por una comunidad autónoma y a enorme distancia del comportamiento medio del Estado (-1,4%).

Son estos datos los que precisamente destacó el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres. Con las elecciones autonómicas a las puertas, el aspirante a revalidar el cargo estableció una comparación poco usual. «En este momento tenemos 75.000 personas más trabajando de las que había en la EPA de julio de 2019», señaló en clave de precampaña electoral antes de lanzar un aviso a navegantes: «En pocos días vamos a saber el dato de abril [paro registrado] y ya adelanto que también será un mes en el que sigue descendiendo el número de parados».

El desempleo crece en España un 3,4% y buscan un puesto de trabajo 3,12 millones de personas

En la misma línea, su viceconsejero de Empleo, Gustavo Santana, puso el acento en «la segunda mejor cifra en personas ocupadas de la serie histórica (977.200)», otro indicador que, en su opinión, «muestra el proceso de recuperación y la fortaleza de la actividad en la economía de Canarias».

Todo lo contrario a lo expuesto por el presidente de la patronal CEOE-Tenerife, Pedro Alfonso, para quien se «está celebrando una recuperación económica que no está consolidada». En su opinión, los malos datos del trimestre se explican por el incremento del salario mínimo y de las cotizaciones sociales. «Los efectos en el mercado laboral ya se ven reflejados, somos la segunda comunidad con mayor aumento del desempleo y la tercera en mayor descenso de ocupados», indicó.

La vuelta de las reglas fiscales

Además, recomendó prudencia ante el cambio de escenario que se producirá cuando el año próximo la Unión Europea (UE) vuelva a exigir el cumplimiento de las reglas fiscales. Eso «va a exigir un severo recorte en el gasto público», advirtió Pedro Alfonso.

El golpe que para la economía española –y otras– supuso la pandemia convenció a Bruselas de la necesidad de abrir la mano con el déficit y la deuda. Las plantillas sanitarias crecieron con intensidad mientras la recaudación fiscal se desplomaba por la paralización del tejido productivo.

La hostelería y el comercio generan 16.100 empleos entre enero y marzo

Recorrer el camino de vuelta es algo que ha de abordarse en un plazo cada más breve. Eso explica en buena parte la destrucción de empleo en las Islas durante los tres primeros meses del año. Del total de 13.600 que se frustraron en ese tiempo, 11.200 lo hicieron en el ámbito público y solo 2.500, en el privado.

En la rama que comparten la hostelería y el comercio junto a otras actividades, se generaron 16.100 puestos de trabajo, que quedaron en nada ante la pérdida de 10.100 en actividades profesionales y científicas, y 9.800 en Administración Pública, Sanidad y Educación. También la construcción perdió 7.000 y la industria, otros 3.700.

67.300 hogares con todos en paro

Al finalizar marzo, en Canarias había 67.300 hogares con al menos una persona en situación activa –en disposición de trabajar– en los que nadie tenía empleo. A pesar de ello, también este parámetro ha experimentado una mejoría en el último año. Son ahora 4.600 menos que al terminar el primer trimestre del año pasado.

Esa reducción del 6,4% se revela insuficiente ante el tamaño del problema. No quiere decir que en todas esas unidades familiares no haya ingresos, es posible que alguno de los parados que la habitan perciba un subsidio o, también, que otro de los ocupantes cobre cada mes una pensión, por poner dos ejemplos. En cualquier caso, la estabilidad económica está ausente.

Aparte de esta mejoría, la EPA correspondiente al primer trimestre del año conocida ayer revela que el 36,4% de los menores de 25 años residentes en Canarias que quieren trabajar no encuentran dónde hacerlo. A pesar de que esa tasa se incrementó en 1,3 puntos entre enero y marzo, es más de 20 puntos menor que la existente hace doce meses.

La tasa de desempleo juvenil mejora más de 20 puntos en el último año

Esa mejoría ha provocado que los 27,3 puntos de diferencia con la media estatal existentes al finalizar los primeros tres meses del año pasado se hayan quedado en solo 6,4.

Por otro lado, a pesar de que el arranque del año no fue positivo en líneas generales, la tendencia no afectó al capítulo de los autónomos, que sumó 5.200. De ellos, 1.100 (1,16% más) sin empleados y 4.100 (8,17%) que sí crean puestos de trabajo. En cambio, el número de asalariados –trabajadores por cuenta ajena– sí cayó. Lo hizo en 13.700 personas, aunque en el Archipiélago hay ahora un total de 40.000 más que hace un año.

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