Los precios no dan tregua y encarecen la torrija de Semana Santa un 17%

Canarias se ha convertido en la segunda comunidad autónoma en la que más se han elevado los precios en un año (6,8%), ocho décimas más que la media nacional. Febrero sirvió para agrandar esa brecha. Mientras el IPC (Índice de Precios de Consumo) avanzó en el Archipiélago un 1,2% en el conjunto de España lo hizo un 0,9%. Buena parte de esa diferencia se explica por el desigual comportamiento de los alimentos, que se encarecieron siete décimas más en el Archipiélago; 2,7% frente a 2%. Con la Semana Santa a las puertas, hasta hacer torrijas requiere de un proceso de reflexión, hoy son un 17% más caras que hace un año. 

Cocinar en casa ocho unidades de este postre –o dulce de entre horas– costaba hace un año 4,46 euros, que pasados por el tamiz de los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) se convierten en 5,23 euros. Deconstruir la sabrosa rebanada de pan emborrachada, edulcorada y aderezada abre las compuertas a un torrente de disgustos para el bolsillo de las familias.

Las Islas soportan el segundo mayor incremento de España en un año

En los últimos doce meses, la leche ha subido un 36,7%; el azúcar, un 36,5%; los huevos, un 33,3%, y el aceite, un 32,1%. Fuera del club de los 30, el pan cuesta un 19,9% más; si no queremos prescindir del toque que aporta la ralladura de un limón, lo pagaremos un 10,5% más caro, y tampoco escapa la canela, otro 4,5% de subida. La única alegría la aporta la energía –calórica– necesaria para conseguir que la torrija sea tal. El subgrupo electricidad, gas y otros combustibles registra en Canarias una caída del 27,6% en tasa interanual, y del 17,2% en toda España.

Sin embargo, esa traslación tan clara de las medidas adoptadas por el Gobierno central para contener el avance de los precios de la energía se vio seriamente discutida en el segundo mes del año. Se dispararon un 7,7% en todo el Estado y un 10,5% en las Islas, convirtiéndose así en otra de las grandes razones que colocan a la comunidad autónoma en el extremo menos deseable del comportamiento asimétrico que muestran los precios.

En doce meses, la leche ha subido un 36,7%; el azúcar, un 36,5%, y los huevos, un 33,3%

También la inflación subyacente, que elimina de la configuración del IPC los alimentos frescos y los precios energéticos, avanzó dos décimas más en las Islas en febrero. Se sitúa ahora en el 7,9% frente al 7,6% nacional. Otro indicio de que, y aquí viene una de las peores noticias, habrá nuevas subidas de los tipos de interés.

A ello se refirió el presidente de CEOE-Tenerife, Pedro Alfonso, que anticipó el enfriamiento de la economía «en algún momento, sin lugar a dudas». El incremento de los costes de financiación provocará que el sector privado deje sus inversiones para más adelante, con lo que la perspectiva de creación de empleo también se mantendrá en estado latente.

En el mismo sentido, el presidente de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, Santiago Sesé, advirtió de que la deriva inflacionista merma el «crecimiento económico» y «pone en riesgo la continuidad del crecimiento del tejido productivo».

Alfonso criticó al Gobierno de Canarias por no tomar la iniciativa cuando «recauda más que nunca». La entrada de dinero en las arcas públicas crece –vía IGIC– en sintonía con los precios que pagan los consumidores, pero, en palabras del representante empresarial, el Ejecutivo regional «invierte menos que nunca». Por su parte, la patronal de Las Palmas urgió a adoptar medidas para reducir «los costes de producción y el transporte de las mercancías».

Los salarios no crecen al ritmo que marca la inflación y eso provoca que los 1.573 euros mensuales de salario medio –máximo histórico– que se pagaron el pasado año en Canarias brinden una capacidad de compra un 7% inferior a la de 2009, según un informe publicado por Adecco.

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