Los canarios aplican el modo anticrisis: menos carne y pescado y más conservas

Las familias adaptan sus compras para contener el gasto y optan por productos más baratos v Las ventas de salmón bajan un 25% mientras las de sardina apenas un 0,9%

Un puesto de carne del Mercado Nuestra Señora de África, de Santa Cruz de Tenerife. | | MARÍA PISACA

Un puesto de carne del Mercado Nuestra Señora de África, de Santa Cruz de Tenerife. | | MARÍA PISACA / Dalia Guerra

Compras anti-inflación. Esto es lo que están aplicando las familias canarias para tratar de mitigar el gasto que realizan en alimentación y que no para de crecer al hilo de la espiral de subida de precios que vivimos desde principios de año. Ya no todo vale a la hora de introducir productos en el carro del supermercado y los hogares miran con lupa qué se llevan a casa. Un mecanismo que no solo les hace reducir el consumo de aquellos alimentos que son más caros, como la carne o el pescado, que a lo largo de este año ha bajado más de un 20%, sino que dentro de la oferta de estos productos optan por aquellos que suponen un menor incremento en el ticket al pasar por caja.

La subida del Índice de Precios de Consumo (IPC) no ha dado ni un respiro a las familias en todo este año. En Canarias comenzó en enero con un incremento del 5,5%. Un porcentaje que se elevó hasta el 9,5% de agosto y aunque se ha mitigado en los últimos meses cerró en octubre –el último dato disponible– con un alza del 7%. Pero las subidas han sido incluso más dramáticas si se mira exclusivamente como se han disparado los precios de los alimentos y bebidas. Los aumentos del IPC en este apartado no bajan de los dos dígitos desde el mes de abril y octubre registró el mayor incremento del año. La cesta de la compra cuesta ahora un 14,7% más que en 2021.

Las familias canarias buscan fórmulas que les permitan ahorrar algo en el gasto mensual en el supermercado. No es fácil porque la subida es generalizada. Además de realizar más visitas a las tiendas de alimentación para controlar el gasto y evitar el desperdicio, los consumidores restringen sus compras. Según los datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en Canarias el consumo total de alimentos ha descendido entre enero y septiembre de este año un 16,6% respecto al mismo periodo de 2021. Pero el descenso no ha sido igual en todos los productos y se acentúa en aquellos más caros.

Uno de los que más ha bajado sus ventas respecto a los nueve primeros meses de 2021 es la carne. Hasta un 25% menos. Pero el descenso no es igual en todos los tipos. La de vaca o ternera sufre caídas por encima del 30%, la de cabra u oveja baja hasta un 47%, mientras que la de cerdo se consume un 28% menos. Pero otras opciones más baratas, como el pollo, sufren menos y su consumo solo disminuye un 18%.

El consumo de ternera se reduce un 34% y el de carne de oveja un 46% pero el pollo solo cae un 18%

Algo similar ocurre con el pescado. De forma generalizada, los hogares canarios han comprado un 20% menos de este producto en lo que llevamos de año. Pero al poner la lupa sobre cada variedad la situación es distinta. El descenso en el consumo de pescado fresco alcanza un 25%, pero la compra de este mismo producto congelado cae menos, un 13,9%. Los recortes son también acusados en el lenguado (-59%) o en el salmón, un 25%, pero en este último tipo mientras el fresco baja un 50%, la venta del congelado se ha duplicado. Por el contrario, otros tipos de pescado más económicos como la sardina apenas se han resentido y su consumo solo ha bajado un 0,9%. Los boquerones frescos incluso suben un 2,3%.

La situación económica actual también ha hecho descender el consumo de marisco hasta un 24%, las gambas y langostinos un 19%, la venta de almejas y berberechos cae un 32% y las de mejillones bastante menos, un 6%. Además, las familias canarias cada vez ponen menos pulpo o calamares en la mesa, su consumo se ha reducido hasta un 42%, según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.

Pero los ajustes no se registran solo en la compra de carne y pescado sino que se extienden a más productos que son básicos en la despensa de cualquier hogar. Las familias han comprado este año un 20% menos de papas, un 21% de harina y reducido en un 20% su compra de hortalizas o un 16% la de fruta. También caen el vino, otro 17% o la cerveza un 24%.

Asimismo, se ha reducido de forma importante la compra de aceite, un 17%, pero contrariamente a lo que se pudiera pensar no es el de oliva el que más ha bajado sino el de girasol, cuyas ventas han caído este año algo más de un 30%, motivadas por el fuerte encarecimiento que sufrió tras el estallido de la guerra en Ucrania.

Más moderado ha sido el tijeretazo en el consumo de leche, que baja un 13%, el de pan, que sufre un descenso del 15%, o el agua envasada que apenas sufre un recorte del 2%, al ser un producto esencial en muchas casas canarias.

Otro de los productos que parecen estar experimentando un descenso más mitigado son las conservas, ya que debido a su precio más económico, las familias pueden estar recurriendo a ellas para poder seguir consumiendo carne o pescado, aunque sea en lata. Las conservas de carne bajan un 13% –frente al 25% de este mismo producto en su versión fresca– y las de pescado caen un 11%, en contraposición con la caída del 20% del atún o las caballas frescas. Algunos de los productos que sí han experimentado un aumento de su consumo a lo largo de este año son, por ejemplo, las conservas de legumbres –cuyas ventas suben un 10%– o los productos congelados, que registran un alza del 1,1%, así como los platos preparados de cremas o sopas, que este año se han consumido un 3,5% más que el pasado.

Pero aunque el consumo baje, el gasto que desembolsan los canarios en alimentación no lo hace en la misma medida. Desde el verano, el volumen total de productos de alimentación vendidos ha caído un 17,3%, según el departamento comandado por el ministro Luis Planas. Mientras que el gasto de las familias solo lo ha hecho un 8,8% –de 1.106 millones de euros entre junio y septiembre de 2021 a 1.008 en los mismos meses de este año– debido al fuerte alza en los precios que dificulta a muchos llegar a final de mes.

[object Object][object Object]
  • Las ventas de harina en los establecimientos del Archipiélago caen este año un 21%. Un producto que ha subido mucho de precio debido al conflicto bélico en Ucrania.  
[object Object][object Object]
  • Ni siquiera la cerveza se salva del ajuste que están realizando las familias en la cesta de la compra. En los nueve primeros meses de 2022 su consumo baja un 24%. 
[object Object][object Object]
  • Los canarios han reducido hasta en un 24% su consumo de marisco este año. Uno de los productos que suelen encarecer la cesta de la compra y que ahora se escoge con más cuidado.
[object Object][object Object]
  • Las celebraciones tampoco escapan de la reducción en las compras. Tartas y helados han sufrido un recorte del 18% en su consumo este año frente al ejercicio anterior. 
[object Object][object Object]
  • Otro de los productos que ha sufrido un mayor encarecimiento en estos meses, el aceite, también ha visto reducido su consumo. Un 17% de forma general y hasta un 30% el de girasol. 

Suscríbete para seguir leyendo