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Congreso empresarial

Directivos, bancos y energéticas se revuelven contra Sánchez en Zaragoza

La convención anual de ADEA se convierte en altavoz de las críticas al Gobierno por la política fiscal y económica. Patronales y altos ejecutivos rechazan los nuevos impuestos sobre los beneficios de las eléctricas y entidades financieras

Fernando de Mesa.

Al Gobierno que preside Pedro Sánchez le han tenido que pitar los oídos este martes, en la que celebraba además Consejo de Ministros. El origen del chirrido procedía de la sala Mozart del Auditorio de Zaragoza, donde tenía lugar la convención anual de la Asociación de Directivos y Ejecutivos de Aragón (ADEA), cuyas discursos y mesas redondas en la sesión de la mañana han sido toda una enmienda a la política fiscal y energética del Ejecutivo central, con críticas también a la supresión del delito de sedición.

En un contexto cada vez más volátil como consecuencia de los efectos de la pandemia, la guerra de Ucrania y el alza notable de la inflación, la energía fue la principal protagonista del congreso, que logró reunir un millar de personas bajo el título "La energía es economía". También se prestó especial atención a la situación económica del país y a las personas en un mundo en el que la geopolítica tiene cada vez más peso.

El primero en intervenir fue el presidente de ADEA, Salvador Arenere, que hizo un repaso de la situación económica y el contexto de desaceleración al que se encamina España. "Debemos asumir un crecimiento inferior al esperado", apuntó, al tiempo que señaló que la demanda eléctrica está cayendo casi tanto como lo hizo en los primeros meses de la pandemia y el consumo "da síntomas de agotamiento".

La fiscalidad fue centró buena parte de su alocución, con criticas al Gobierno de España por haberse "desligado de la línea europea" al lanzar "impuestos duros" a la banca y a las energéticas que "al final pagaremos los clientes". También envió mensajes al cuatripartito de la DGA para que Aragón deje de "estar a la cola" en competitividad fiscal y se elimine el impuesto de Patrimonio que pagan el 1% de los aragoneses que tienen grandes fortunas. "Los países más atractivos fiscalmente son los que crecen por encima de la media", apuntó. Arenere se pronunció asimismo sobre la polémica de la sedición"en ADEA no estamos de acuerdo. Es despenalizar lo que no despenalizable".

La inauguración del congreso corrió a cargo del alcalde de Zaragoza y líder del PP de Aragón, Jorge Azcónquien recogió el guante de los cambios en el Código Penal que prepara el Gobierno. "Es un atentado contra nuestro sistema de valores, pero reformas el delito de la malversación es defender la corrupción", afirmó.

El resto de su intervención fue sobre la energía, que "nos afecta a todos, también a las instituciones". "Ahora más que nunca el ahorro de energía es el debate en el que tenemos que estar las ciudades", recalcó. La factura eléctrica de la capital aragonesa ronda los 50 millones de euros al año. Para reducir este gasto, Azcón anunció que el ayuntamiento va a cambiar por luces Led todo el alumbrado público, una tecnología que permite un ahorro medio del 75% que ahora solo tiene el 10% de las 84.000 farolas de esta gran urbe. Con esta medida, se reducirá el gasto de 18 a 6 millones.

Azcón también habló de la apuesta del gobierno municipal PP-Cs por la electrificación de los autobuses, la rehabilitación de vivienda y las comunidades energéticas, pero si algo sorprendió fue su crítica a la instalación de plantas renovables en ciertas zonas de Aragón: "es un error que en comarcas que viven del turismo se permitan que esos proyectos vean la luz".

Ingresos tributarios "caídos del cielo"

Por su parte, Íñigo Fernández de Mesa, vicepresidente de la patronal CEOE y del banco de inversión Rothschild en España, hizo un discurso de marcado carácter neoliberal en el que censuró la política económica del Gobierno de Sánchez y abogó por una "política fiscal prudente" para ayudar a las empresas y la personas y por la moderación salarial. El exalto cargo de Mariano Rajoy advirtió de la "enorme desajuste fiscal" y lamentó que el Ejecutivo central no se consciente de este problema. "Hay que corregirlo con un control del gasto", apuntó tras señalar que los ingresos "extraordinarios caídos del cielo" que está teniendo el Estado con la recaudación tributaria.

En este sentido, rechazó la reforma fiscal que última Sánchez. "Qué directivo europeo va a querer que su empresa venga España. Si quiere atraer talento tendrá que tener una fiscalidad que no sea confiscatoria", afirmó. El "gran reto", a su juicio, es reducir el déficit y la deuda pública. Fernández de Mesa lamentó la "enorme vulnerabilidad" que sufren las empresas españolas, que han sido, en su opinión, las peor tratadas en Europa durante la crisis del coronavirus.

Sobre la crisis del gas, señaló que España "no tiene un problema de suministro, pero sí de precio" como consecuencia de la drástica reducción de las importaciones europeas desde Rusia. Aunque este hidrocarburo se ha abarato un 70% desde el pico que alcanzó en agosto, auguró que la presión volverá cuando empiece el frío.

A vueltas con el impuesto a las energéticas

La primera mesa de debate de la convención tenía por título “La energía como palanca del desarrollo y de la economía” y fue conducida por el director general de Itesal, Armando Mateos. En ella, la presidenta de la Asociación de Empresas de Energía Eléctrica y vicepresidenta de CEOE, la zaragozana Marina Serrano, puso el foco en conseguir fórmulas que permitan que los consumidores y pymes no estén sometidas a la volatilidad de los precios de la electricidad. Por ejemplo, mediante contratos a largo plazo que permitan prever riesgos a los consumidores.

Abogó también por tomar medidas "acomodas" al reglamento de la UE y reprobó el impuesto a las energéticas que está tramitando el Congreso por recaer en las ventas en lugar de los beneficios, como ocurre en otros países europeos. A su juicio, supone un "agravio comparativo" para unas empresas que son "el motor de la descarbonización".

También formó parte del coloquio el director de Regulación de Endesa, Juan José Alba. En sus palabras subrayó el “giro copernicano” que ha experimentado la Unión Europea y que le ha llevado a “abrir la puerta a las intervenciones”. “Las medidas que ha puesto en marcha la UE y los diversos países ponen de manifiesto, en la mayoría de ocasiones, que desconocen cómo funciona el mercado de la electricidad”, aseveró.

Por su parte, el secretario general y director Jurídico y de Regulación de Redexis, Ignacio Pereña, insistió en la necesidad de plantearse “qué alternativas debemos plantearnos en el futuro” y además “considerar los objetivos a largo plazo, sin olvidarse tampoco del corto plazo y de los problemas que hay que atender”.

La inflación incrementa la desigualdad

La conferencia de clausura, acto previo a la jornada vespertina, estuvo protagonizada por el senior advisor de Contexto Económico en Llorente y Cuenca, Jordi Sevilla. En su ponencia, el economista reflexiono acerca de la guerra de Ucrania y sus consecuencias como la subida de los precios de los alimentos, que "en Europa nos lleva a la inflación y en África a la"hambruna”.

Para Sevilla, la subida de la inflación es un “hecho real” que tiene dos efectos inmediatos: “afecta al poder adquisitivo de las familias y les está subiendo el coste a las empresas”. En ese sentido, que la escalada de precios “golpea más las rentas bajas” y ello provoca un “aumento de la desigualdad” porque “su cesta de la compra está mucho más cargada de gasto en energía y en alimentación que en otras”.

La segunda mesa de debate, titulada “El presente y el futuro de la economía”, abordó esos asuntos en una conversación presentada por el socio de Deloitte Aragón, David Álvarez, y dio voz a tres sectores muy diferenciados: la banca, la empresa y la administración pública. La presidenta de la Asociación Española de Banca (AEB), Alejandra Kindelán, trasladó tres mensajes para analizar la realidad presente desde el prisma de su propio sector. “la economía se enfría y la banca está para apoyar, el principal enemigo de todos es la inflación, y es el momento de ser muy sensibles a la situación”, concreto.

Para exponer la visión del mundo empresarial, el consejero delegado de Cementos Molins, Julio Rodríguez, recalcó que la presencia nacional e internacional de su compañía le ha permitido comprobar que el coste de la energía “no está afectando igual” a todos los países y que los gobiernos “no actúan de manera similar”.

También participó en este coloquio la consejera de Hacienda del Ayuntamiento de Zaragoza, María Navarro, que expuso las líneas maestras de la labor del equipo de gobierno del consistorio en la presente legislatura. “Defendemos que hay que bajar los impuestos para atraer empresas, generar empleo y fomentar el consumo en los ciudadanos”, afirmó.

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