El canciller alemán, Olaf Scholz, se reúne este miércoles con los jefes de Gobierno de los Länder en una convocatoria extraordinaria destinada a negociar los términos de los nuevos alivios destinados a la ciudadanía para compensar el incremento de los precios de la energía.

El freno a la factura del gas, la fórmula para abaratar el precio del transporte público y los términos del futuro paquete de medidas para compensar a los ciudadanos por las subidas de precios están en la agenda de la reunión, prevista para la tarde de hoy.

Clave del encuentro también serán las decisiones que se pacten en materia de nuevo endeudamiento para financiar las nuevas medidas, que las regiones pretenden quede cubierto mediante la declaración de un estado de emergencia que permita superar el freno de la deuda al que están obligadas las administraciones.

La víspera de la reunión fue precedida de la revelación de que el gobierno se propone avanzar a febrero, un mes antes de lo que se barajaba, la implantación de un freno al precio del gas para paliar el incremento de la factura energética en el ciudadano.

Según informaciones coincidentes que publicaron este martes "Der Spiegel" y la televisión pública ARD, el Ejecutivo del canciller Scholz prevé que la medida entre en vigor en febrero, mientras que la comisión de expertos que asesora al gobierno había planteado hacerlo en marzo.

El canciller propondrá este avance a los jefes de los gobiernos regionales y se espera que estos la respalden, ya que de hecho éstos eran partidarios de que el freno se implante en enero, de modo que febrero sería una solución de compromiso.

La medida se enmarca en el acuerdo adoptado por el tripartido entre socialdemócratas, verdes y liberales de Scholz, que contempla un paquete de hasta 200.000 millones de euros para paliar el aumento de la factura energética en el consumidor.

Este paquete incluye medidas de apoyo a las empresas y también a los hogares, que el Gobierno pretende financiar a base de créditos.

Junto al precio del gas, se implantará también un tope al de la electricidad, lo que se contempla ocurra ya en enero, según avanzó hace unas semanas el ministro de Economía y Protección del Medio Ambiente, el verde Robert Habeck.