La apuesta por el fomento del desarrollo sostenible desde el sector energético ha hecho que Cepsa haya dado un paso decisivo para ser referente en la transición energética. En esta línea, ha lanzado su nueva estrategia Positive Motion, que, con el horizonte en el año 2030, pretende convertirse en líder en movilidad y energía sostenibles en España y Portugal.
Para ello, la compañía invertirá en esta década entre 7.000 y 8.000 millones de euros, de los cuales, un 60% se destinará a negocios sostenibles a partir de 2023. Con ello, prevé que, en 2030, la contribución de los negocios sostenibles al EBITDA supere el 50%.
Otra de sus apuestas se centra en ir más allá de las cero emisiones netas (Net Zero) y llegar al Net Positive. Su meta se sitúa en reducir sus emisiones de CO2 en un 55% en 2030 respecto a 2019, mientras que la intensidad de carbono de sus productos se reducirá entre un 15% y un 20% en 2030.
Estas nuevas líneas de actuación tendrán su reflejo en Canarias, donde invertirá en esta década 400 millones de euros con el fin de reforzar su posición como primer suministrador de energía del Archipiélago. Un objetivo que va a ir unido a la transformación de su actividad, apostando por proporcionar energía más verde, además de acelerar la transición hacia la movilidad sostenible.
Una de las acciones más relevantes que tiene previsto desarrollar en las Islas se centra en la desinstalación de la Refinería de Santa Cruz de Tenerife, infraestructura que fue la que dio origen a Cepsa en 1930. Un proceso que supone un hito histórico y que se llevará a cabo de forma gradual durante los próximos años.
Esta iniciativa forma parte del proyecto Santa Cruz Verde 2030, que contempla devolver estos terrenos industriales, con una extensión de más de medio millón de metros cuadrados, a la ciudad al final de esta década. Los primeros trabajos, ya iniciados, se centrarán en la retirada de algunas de las unidades de la Refinería, un proceso que se extenderá hasta 2025.
La desinstalación de la Refinería está vinculada a la puesta en marcha de un nuevo parque de almacenamiento y distribución en el Puerto de Granadilla, previsto para finales de 2025. Se trata de una infraestructura logística estratégica y digitalizada en una concesión portuaria, que permitirá el tránsito energético y la distribución de todo tipo de combustibles, incluidos biocombustibles. La nueva terminal contará con una capacidad de almacenamiento de 121.500 m3, de los que más de la mitad serán combustibles para la aviación.
La puesta en marcha de dicha instalación permitirá que se pueda acometer la segunda fase del proyecto de desinstalación de la Refinería, con la retirada de los restantes equipos existentes en la Refinería y la remediación voluntaria de los suelos.
La nueva estrategia de Cepsa, extensiva a nivel nacional e internacional, cuenta con un ambicioso plan de actuaciones para 2030 que contempla liderar la producción en España y Portugal de hidrógeno verde, con una capacidad de producción de 2 GW, así como de biocombustibles, con 2,5 millones de toneladas, y de combustibles sostenible para aviación, con 800.000 toneladas.
De la mano de la compañía integral de infraestructuras energéticas Redexis, la energética ha dado un paso adelante para la creación de la primera red global de estaciones de servicio generadora de energía renovable de Europa, con la instalación de más de 40.000 placas solares con una capacidad de producción de más de 32.800 MWh al año.
Además, para 2030 desarrollará una cartera de proyectos solares y eólicos con una capacidad de 7 GW que servirá para satisfacer el consumo energético de la compañía, especialmente para la producción de hidrógeno verde, un vector energético que espera liderar en esta década.
Descarbonización del transporte en el Archipiélago
Otro de los focos de atención se centra en la descarbonización del transporte por carretera. En este ámbito, la compañía instalará en los próximos 12 meses un total de 100 cargadores ultrarrápidos de 150 kW en más de la mitad de sus establecimientos en las Islas. Además, en 2024 espera contar con estos dispositivos en todas sus estaciones de servicio de Canarias.
La energética ha suscrito también una alianza con la compañía de coches de alquiler CICAR para promover la movilidad eléctrica en las islas, a través del desarrollo de un modelo de negocio dirigido a fomentar el vehículo eléctrico de alquiler.
La iniciativa contempla que los clientes que alquilen un vehículo eléctrico tengan incluido dentro del precio del servicio la recarga en la red ultrarrápida que habilitará Cepsa en Canarias y en las bases de CICAR que completen la red pública de recarga de la energética. La instalación, puesta en marcha, operación y mantenimiento de dichas bases correrá a cargo de Cepsa.
Paso a los biocombustibles
Otra de las acciones para impulsar la transición energética va dirigida a la producción de biocombustibles de segunda generación, ámbito en el que cuenta con una amplia experiencia, y que se comercializarán en las Islas. Una medida con un impacto global en el transporte marítimo, terrestre y aéreo y que toma todavía más peso en Canarias, teniendo en cuenta que Cepsa es el primer suministrador de combustibles en todos los puertos y aeropuertos de la Comunidad. En esta línea, Cepsa ha alcanzado acuerdos con las principales aerolíneas, como Binter, Iberia, Iberia Express, Air Nostrum y Vueling, para el desarrollo e investigación de combustibles sostenibles, sí como otras alternativas energéticas, como el hidrógeno renovable y la electrificación, para las flotas terrestres de las aerolíneas.
