Desde que en enero se firmó el acuerdo que parecía desenmarañar la relación entre el fondo de inversión Hiperion y los trabajadores de JSP, una sucesión de hechos han colocado a la industria canaria más cerca que nunca de su liquidación. Tanto se ha torcido el rumbo que el administrador concursal solicitó al inicio de este mes al juez la «venta de la unidad productiva», lo que de facto supone subastar la histórica empresa. Si en los próximos tres meses no aparece quien quiera reflotarla y continuar con el negocio, la compañía se liquidará.
En un auto fechado el pasado 21 de abril, el titular del Juzgado de lo Mercantil número 2 de Las Palmas de Gran Canaria, Guillermo Fernández, atendió el recurso presentado por los letrados Rafael Franco y Ricardo Lagares, en representación de Praxis Concursal, empresa que comanda la administración concursal de José Sánchez Peñate SA y Celgán SA. Además, se abre la posibilidad de admitir la compra por lotes de los activos: fábrica de lácteos de Güímar, tostadero de café de Los Majuelos, fábrica de pan de El Tablero y fábrica de Celgán de Los Baldíos.
Fuentes del entorno de Hiperion aseguran que el fondo asturiano continúa interesado en hacerse con las riendas de JSP y afirman que el juzgado recibió una oferta de su parte en las últimas semanas. Sin embargo, ese hecho se produjo después de que la administración concursal diera el paso de solicitar al juez la venta de la compañía «en el plazo de dos meses» para evitar que caiga en la total inactividad y poder preservar un mínimo de vigor comercial. Y eso a pesar de que Praxis Concursal no es ajena al «riesgo de que el precio obtenido no se corresponda con el valor real de mercado» por las prisas.
Son necesarios entre 18 y 20 millones de euros para devolver a la industria a la normal actividad
Se estima entre los 18 y los 20 millones de euros la suma a comprometer para hacer factible la vuelta de la empresa a un nivel de actividad rentable. La estrategia expuesta por Praxis Concursal al juez Fernández de cara a garantizarse las mayores posibilidades de éxito en la subasta fue la de realizar una prospección para elegir a una compañía especializada en captar posibles inversores en este tipo de procesos. «Del resultado de la evaluación, se ha seleccionado a la entidad Asemar Concursal SLP, que asesorada por la consultora multinacional Ernst & Young, forman un equipo multidisciplinar adecuado y de alto nivel.
¿Qué ha ocurrido para que a estas alturas no se haya reconducido la situación? Hiperion está dispuesto a establecer una planificación para la necesaria inversión, lo que en ningún caso pasa por el desembolso inmediato de la cantidad. Además, la administración concursal no vio con buenos ojos que se diera marcha atrás al acuerdo firmado con los trabajadores.
Además de admitir quedarse con los 147 empleados que había a la firma del ERE de enero, el compromiso exigía elevar de 16 a 25 días por año trabajado y un máximo de 16 mensualidades –en lugar de doce– las indemnizaciones para los 270 despedidos. Sin embargo, la relectura de la ley bastó para dar marcha atrás. Se mantendrá el compromiso si hay continuidad de la empresa, y se evaporará si se llega a liquidación.
