La siniestralidad laboral, que tuvo un marcado descenso durante 2020 como consecuencia de las diferentes restricciones a la actividad económica, ha vuelto a aumentar en la segunda mitad del año pasado. Aun así, Canarias se mantiene como la autonomía con menor siniestralidad laboral (53,1 accidentes que causaron baja cada 10.000 ocupados) y eso que se ha incrementado un 18,4% en el último año. 

Así lo recoge un estudio de Adecco Group Institute, el centro de estudios y divulgación del Grupo Adecco, que presenta una nueva entrega del Monitor Adecco de Oportunidades y Satisfacción en el Empleo que, semestralmente desde hace diez años, profundiza en el grado de satisfacción de los trabajadores españoles, así como en las oportunidades laborales del mercado de trabajo.

Para la realización del informe se toman en consideración cinco áreas fundamentales en el entorno laboral de las personas como son la remuneración, la seguridad laboral, las oportunidades de empleo y desarrollo profesional, la conciliación entre la vida personal y la profesional y la conflictividad laboral. En total, se analizan 16 subvariables diferentes.

Por otro lado, el número de parados de larga duración (aquellos que buscan empleo sin conseguirlo desde hace al menos dos años) ha crecido en España por tercer trimestre consecutivo. Sin embargo, al mismo tiempo, el colectivo de desocupados de corta duración se ha reducido, permitiendo que, en la segunda mitad de 2021, el número total de personas sin empleo haya descendido. En todo caso, es destacable que desde 2014 no se producían tres trimestres consecutivos con aumentos en el número de parados de larga duración.

Mientras el número total de parados es de 3,1 millones (616.000 menos que un año antes), en el trimestre analizado se han contado 912.000 desocupados de larga duración (26.600 más que hace un año). En este colectivo se encuentran especialmente representados trabajadores seniors y personas, independientemente de la edad, con bajas cualificaciones.

Como proporción del total de personas sin empleo, considerando la media de los últimos cuatro trimestres que analiza el Monitor Adecco, los parados de larga duración equivalen al 27% del total de parados españoles, 3 puntos porcentuales más que al final de 2020 y la mayor proporción en un año y medio.

Por autonomías

Un total de 15 autonomías han visto aumentar su proporción de parados de larga duración. Las excepciones han sido Extremadura y Castilla-La Mancha. Diez comunidades han replicado la dinámica general, con un aumento en la cantidad de parados de larga duración, simultáneo a un retroceso en el paro de corto plazo. En todas las demás -incluida Canarias- se han reducido ambos grupos de parados.

En Canarias, mientras ha bajado en 3.500 personas el número de parados de larga duración, ha caído en 56.400 el colectivo de parados de corta duración. De esto surge un descenso total de 59.900 desocupados a lo largo de los últimos doce meses. El grupo de parados de larga duración suma en la actualidad 77.100 personas en el archipiélago.

La dinámica anterior ha supuesto un incremento interanual de 1,9 puntos porcentuales en la proporción de parados de larga duración en Canarias, hasta el 28,9% del total de parados. La misma es la tercera más alta del conjunto autonómico.

Andalucía (31,1%; +4,4 puntos porcentuales) pasa a ser la autonomía con mayor proporción de parados de larga duración, seguida por Asturias (30,5%; +3,7 p.p.). Ambas son las únicas regiones en donde esta variable supera el 30% y, también, las únicas con una mayor proporción de desempleo de larga duración que Canarias.

Pese a un fuerte incremento de 5,8 p.p., Baleares continúa siendo la comunidad con menor proporción de parados de larga duración, ahora con un 18%. Le siguen La Rioja (20,8%; +1,2 p.p.), Aragón (21,4%; +0,2 p.p.), Cataluña (22,3%; +4,3 p.p.) y la Comunidad de Madrid (23,4%; +2 p.p.). Estas últimas cinco regiones se caracterizan por ser las únicas con menos de un 25% de paro de larga duración.