El encuentro digital sobre la salud financiera, celebrado por La Provincia y El Día ha estudiado, junto a expertos de diferentes ámbitos, la importancia y qué hacer para tener una mejor gestión y lograr una economía saneada. Esta pasa por poner el dinero ahorrado a trabajar, la planificación, el asesoramiento profesional, entre otros aspectos en los que han coincidido.

La Doctora en Economía y profesora de la ULPGC, Victoria Ruiz, asegura que la salud financiera es algo que se conoce, sobre la que cada persona puede actuar, pero “se puede hacer mejor”, en un apunte en el que ha coincidido el responsable de productos digitales de BBVA en España, Alberto Guillén. “El término es conocido, pero no se sabe lo que abarca” y esto a su juicio es crucial. “Para poder trabajar hay que planificar y no desde el síntoma”. En este sentido, la base es el “día a día, un equilibrio entre ingresos y gastos, planificar el ahorro y gestionar a su vez el futuro, de acuerdo a cada etapa de la vida”.

Durante la pandemia, y por las restricciones a movilidad y ocio, tal y como ha planteado el periodista y moderador del encuentro, Miguel Ayala, ha crecido el ahorro en los hogares españoles y ha demostrado lo importante que es la planificación y anticipación para hacer frente a imprevistos. En este sentido la Doctora en Economía y profesora de la ULPGC, Victoria Ruiz, ha hecho hincapié en el momento actual. “Nadie estaba preparado para acontecimiento de esta magnitud” y menos en Canarias. Hay que tener en cuenta que las dos comunidades insulares, Baleares y Canarias, lideran el ranking en destrucción de empresas debido al impacto económico de las restricciones a la movilidad. Pero no hay que olvidar que “de las crisis siempre se aprende algo” y aunque “todavía hay incertidumbre”, la economía necesita que “comencemos a consumir, a utilizar esas bolsas de ahorro, pero sin olvidar el aprendizaje de que crear y gestionar adecuadamente un colchón económico es esencial para nuestro futuro”.

"De toda crisis se aprende. De esta hemos aprendido a usar la tarjeta como monedero y a planificarnos mejor"

Victoria Ruiz - Doctora en Economía y profesora de la ULPGC

Esta planificación, ha expresado el responsable de productos digitales de BBVA en España, Alberto Guillén, se ha puesto sobre la mesa con “el ahorro forzado de los ERTEs o este colchón de oxígeno necesario para las familias”, para mantener el consumo “pero de una manera sana”, ha apuntado.

Como ha expresado Alberto Guillén, BBVA trabaja desde hace años en salud financiera y ha impulsado este servicio con el objetivo de “el cliente entienda su economía y sus finanzas”, para así “empoderarse con un control de sus gastos e ingresos, conocer su patrimonio neto y el agregado de todas sus cuentas” entre otras cuestiones.

Alberto Guillén ha destacado que sus clientes tienen ahora un mayor interés en gestionar su salud financiera. Desde abril, cuando el banco lanzó su nueva herramienta digital de salud financiera, cualquier cliente puede consultar con “una visión global” los datos esenciales de sus finanzas personales y notamos que, “aunque cuesta salir de los datos financieros del día a día”, cada vez existe “más conciencia y planificación” de sus ingresos, sus gastos y de su ahorro. Los clientes, ha dicho “se están apoyando más en esta experiencia” y a día de hoy “el 40% de los clientes digitales interactúa todos los meses”.

"Un 40% de los clientes digitales del BBVA interactúa mensualmente con la herramienta de salud financiera"

Alberto Guillén - Responsable de productos digitales de BBVA en España

Por su parte, la profesora de la ULPGC, Victoria Ruiz, ha señalado la importancia de la gestión de la deuda para el futuro. “El 2008 nos enseñó a tener un colchón y no sobre endeudarnos” pero nos encontramos ante una situación diferente. Durante esta crisis de la COVID “hemos utilizado nuestra tarjeta, pero como monedero, no para endeudarnos más”. Además, asegura, “nos enseñará a planificarnos, a entender que los ingresos seguros son la base y el colchón de ahorro debe hacerse sobre el variable”.

Los expertos también han señalado la necesidad de incorporar enseñanzas sobre salud financiera y finanzas en las diferentes etapas escolares, más allá de desarrollar una asignatura curricular concreta. En opinión de la profesora de la ULPGC, las finanzas tienen la función y la virtud de poder “acompañar a una persona de por vida”, algo que define como “un aspecto fundamental que hay que ir introduciendo”. “En el informe PISA se tienen en cuenta las competencias financieras de los alumnos porque, al final, todos nosotros debemos enfrentarnos a decisiones financieras a lo largo de nuestra vida. En este sentido, creo que los conceptos se deben ir introduciendo desde la educación secundaria”, ha indicado. En su opinión, “puede que no sea necesaria una asignatura específica, pero sí píldoras formativas”.

“Hay material interesante sobre esto que los profesores podrían utilizar en sus aulas”, ha destacado la profesora universitaria, por lo que “se podría incluir en la formación académica” para crear un hábito de cara al futuro. 

Tener un objetivo y un plan

El ahorro, el consumo sostenible y la gestión de la deuda, ha expresado Alberto Guillén son ejes para una salud financiera y una economía saneada, al igual que “tener el hábito, la información necesaria y actuar conforme a ella”. La misma idea ha destacado la Doctora de la ULPGC, Victoria Ruiz, que ha señalado la importancia de “marcar un objetivo y hacer un plan para actuar”, con una “gestión viable tras medir, controlar y tener claro que ahorrar no es aparcar el dinero sino ponerlo a trabajar de manera eficiente”.

Para ello, los expertos coinciden en que “las entidades están para el asesoramiento y gracias a este, ahorrar se puede convertir en objetivo”, ha apuntado Alberto Guillén.