Las crisis también pueden generar oportunidades y la provocada por el coronavirus ha supuesto para el sector primario en Canarias una apertura a la digitalización, uno de los grandes desafíos que la actividad tenía que abordar en las Islas. La llegada de la pandemia y el cierre de canales de venta de la hostelería y restauración abrieron nuevas formas de comercialización online, que han llegado para quedarse. «Lo que era una necesidad es ahora una oportunidad de negocio para los productores, que pueden llegar al consumidor de una manera más directa». Así lo aseguró ayer la consejera de Agricultura, Ganadería y Pesca del Gobierno de Canarias, Alicia Vanoostende, durante su participación en el Foro Agro Santander, que contó con la colaboración de EL DÍA, y que ha querido abordar en esta edición los retos que debe afrontar el sector primario en las Islas.
La responsable regional también aseguró que la pandemia ha favorecido que exista «una mayor sensibilización con el producto local», así como en su trazabilidad, ya que en Canarias «se producen con estándares europeos y damos una seguridad que otros no dan». Un plus de calidad que con la crisis parece que ha calado en el consumidor canario, que tras ver las estanterías vacías en los lineales de los supermercados durante los primeros días del confinamiento se dio cuenta «de lo importante que es generar nuestros propios alimentos».
En el reto de la digitalización del sector primario, el banco Santander ha sido pionero en ofrecer a los profesionales agrícolas y ganaderos las alternativas necesarias para facilitar esta transición. Así lo explicó ayer la directora territorial del banco en Canarias, Beatriz Martínez Ruiz. «La digitalización es el futuro», sostuvo. La entidad presidida por Ana Botín pone a disposición de los profesionales del sector los Préstamos I+D Agro o el Cuaderno de Campo Digital, una herramienta novedosa que permite tener toda la información de las explotaciones de manera digitalizada para mejorar su sostenibilidad. Además, Santander fue el primer banco en ofrecer a los productores la posibilidad de contratar el anticipo de ayudas como Programa Comunitario de Apoyo a las Producciones Agrarias de Canarias (Posei), un trámite que puede realizarse también de manera digital.
De esta manera, el fomento de la digitalización se ha convertido en el segundo eje de apoyo a los agricultores y ganaderos por parte del Santander. El primero sigue siendo la financiación que continúan aportando en un momento difícil para el tejido productivo.
Precisamente de las posibilidades de financiación para poder acometer inversiones en el sector habló también la consejera regional, Alicia Vanoostende, durante su intervención el Foro Agro Santander, – que se celebró en el Hotel Silken Atlántida Santa Cruz, y en el que también participó la responsable de Negocio Agroalimentario de Santander España, Lorena Ruiz Ponce y que estuvo presentado por el redactor de Economía del periódico EL DÍA, Moisés Álvarez Montero.
Vanoostende indicó que es vital contar con seguridad jurídica para poder desarrollar este tipo de inversiones, que no solo pueden aprovechar los nuevos segmentos de negocio que pueden abrirse para el sector, sino también las posibilidades de financiación que ofrecen entidades bancarias como Santander y de los incentivos fiscales que existen en Canarias para la actividad agraria. «Mucho se habla de la ZEC y la RIC, pero también existen bonificaciones en el sector primario, que tiene mejores condiciones que otros en materia tributaria», añade. Unas bonificaciones que alcanzan el 50% en el caso del impuesto de sociedades y la renta, así como en la tributación de las diferentes ayudas.
La consejera señaló la importancia del acceso a la información para poder identificar nuevas oportunidades de negocio en el sector primario. No solo en lo que se refiere específicamente a las condiciones del terreno o de adaptación climática de nuevos cultivos, sino también a identificar qué tipo de productos está importando Canarias para saber con cuáles se podría competir.
Para que los emprendedores puedan identificar mejor esas oportunidades de negocio, la consejera regional avanzó que la Consejería está trabajando dentro del Plan de Soberanía Alimentaria para ofrecer datos en abierto acerca de los costes de producción o cuáles son los precios de venta. «En otras comunidades ya se está haciendo y creemos que son datos que es necesario compartir con el sector para que cualquiera pueda entrar a comprobarlos y buscar nuevas oportunidades de negocio», valoró.
Generar nuevas rentas alternativas para las actividades agrícolas es también determinante para la supervivencia del sector. Vanoostende indicó que en Canarias el turismo debe ser «el hermano mayor» que apoye a las explotaciones de las Islas, ya que supone un mercado potencial importante. «Hay que buscar el encuentro entre ellos para potenciar el consumo del producto local», mantuvo Vanoostende.
La Consejería también está trabajando para dotar de mayor seguridad jurídica a las explotaciones, impulsando un reglamento que aborde las cuestiones urbanísticas del suelo agrario y simplificando las licencias para facilitar las inversiones, a través de un decreto de medidas urgentes que también facilitará el procedimiento para poder legalizar las explotaciones ganaderas.
En este momento en el que la recuperación empieza a despegar, la consejera no quiso pasar por alto las diferentes líneas de ayuda que podrán beneficiar al sector para afrontar esta nueva etapa. Los productores podrán acogerse a la línea de ayuda de los 1.144 millones que el Estado destina a Canarias para compensar las pérdidas, mientras que la Consejería ha podido mejorar los Planes de Desarrollo Rural gracias a los fondos Next Generation y se podrá desarrollar un Plan de Regadío por valor de 60 millones procedentes del plan de Recuperación y Resiliencia europeos.
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