Las patronales hoteleras de Canarias reclaman al Gobierno central que modifique la normativa que obliga llevar mascarillas mientras se toma el sol en la playa y en espacios naturales. Los empresarios consideran que el endurecimiento de esta medida puede afectar a la reactivación turística en los próximos meses, ya que muchos visitantes pueden plantearse viajar a otros destinos competidores donde el uso de la mascarilla es mucho más laxo.

La Asociación Hotelera y Extrahotelera de Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro (Ashotel) considera que la última norma aprobada por el Gobierno central, en la que se hace obligatorio el uso de mascarillas en cualquier espacio público, independientemente de la distancia, como playas y zonas en la naturaleza, no responde realmente a criterios sanitarios.

“Hacer obligatorio ahora el uso de mascarillas en zonas de confluencia de los pocos turistas que tenemos, como las playas de Canarias, nos parece algo extemporáneo, que no tiene sentido, salvo que se demuestre que es en estos lugares donde se producen los mayores contagios”, afirma el presidente de Ashotel, Jorge Marichal, quien añade que esta medida “es desincentivadora de cara a los próximos meses, en los que el sector turístico ha puesto sus esperanzas para la remontada, una vez que poco a poco toda Europa se vaya vacunando”. “Exigimos al Gobierno que explique realmente el porqué de esta medida y, si tiene justificación, la acataremos; pero si no es así, lo que pedimos es su retirada, porque está haciendo muchísimo daño a la imagen de este país, a la economía y, por ende, al sector turístico”, explica.

Ashotel considera extraño que un año después del inicio de la pandemia se tomen medidas como esta. “Entendemos que el Ejecutivo central, a través de los datos de las autoridades sanitarias, debe conocer perfectamente dónde están los focos de contagio con datos contrastados. No parece lógico, por tanto, que ahora se quiera actuar en espacios públicos como las playas o abiertos al público, como los establecimientos alojativos en sus zonas comunes, cuando parece que ahí no están los problemas de mayor incidencia acumulada”, comenta Marichal, quien insiste en pedir “rigor y coherencia en las medidas que se adopten, ya que con ellas se genera más incertidumbre de cara a la próxima fecha de reactivación del sector, que es el verano”.

El presidente de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Las Palmas (FEHT), José María Mañaricua, se muestra convencido de que Canarias logrará imponer su experiencia en el uso de las mascarillas en estos espacios, ya que se ha demostrado que no llevarla en una hamaca si se guarda la distancia de seguridad no hace aumentar los contagios, ya que el Archipiélago sigue siendo uno de los territorios con menor incidencia. “El Gobierno de Canarias demostrará en la comisión interterritorial que la experiencia de las Islas es válida y que se extrapole a todo el territorio español”, asegura.

En el caso de que no se logre cambiar esta norma, “invitaremos a través de Jorge Marichal a la ministra de Turismo, Reyes Maroto, para que vea como es una experiencia en la playa con y sin mascarilla”.

La presidenta de la Asociación Insular de Empresarios de Hoteles y Apartamentos de Lanzarote (Asolan), Susana Pérez, teme que el endurecimiento de esta medida puede generar rechazo entre los turistas que quieran viajar a Canarias y que esto repercuta en las reservas de los próximos meses. “ Podría influir en la toma de decisión de los turistas de cara al verano”, que podrían optar por otros destinos competidores como Grecia o Turquía con una normativa menos restrictiva.

Pérez insiste en que hasta ahora los turistas han convivido con la obligatoriedad de llevar mascarilla en la playa y las piscinas, excepto en el momento de tomar el sol y bañarse, pero “ir más allá puede ser un impedimento para la llegada de visitantes” y más teniendo en cuenta que algunos de los principales países emisores, como el Reino Unido, ya están aliviando las medidas de protección debido a su avance en la vacunación. “No estamos suscribiendo que se tenga que quitar la mascarilla de forma generalizada, pero entendemos que las medidas que ya estaban implantadas dan respuesta a las necesidades de evitar la trasmisión”, aclara.