El jefe de la Autoridad del Canal de Suez, el almirante Osama Rabie, sostuvo ayer en la que fue su primera comparecencia ante los medios de comunicación que no puede decir cuándo será desbloqueada esta importante vía marítima, taponada desde el pasado martes por el buque superportacontenedores Ever Given.

“Es difícil decir un tiempo para solucionar el problema”, afirmó Rabie en una multitudinaria rueda de prensa celebrada en la sede de la Autoridad, en la ciudad de Ismailiya, a orillas del canal de Suez. Sin embargo, se mostró optimista en torno a la posibilidad de que finalmente pueda moverse el gigantesco barco con los catorce remolcadores que desde el viernes intentan arrastrarlo, aunque eso dependerá de que la marea sea favorable.

“No puedo decir cuándo vamos a terminar, a lo mejor esta noche, si Dios quiere, a lo mejor mañana (por hoy)”, dijo el almirante ante las preguntas insistentes de los periodistas. Explicó que, después de retirar la arena de la orilla en la que está encallado el Ever Given y excavar para aumentar la profundidad del canal en esta zona, la opción principal en estos momentos es arrastrar el portacontenedores.

El plan B

La siguiente opción, en el caso de que no sea posible moverlo con toda su carga, es descargar parte de los contenedores para aligerar el peso del Ever Given, que lleva a bordo 18.300 contenedores de mercancías, según los datos ofrecidos por el propio Rabie.

El almirante destacó el gran tamaño de la nave, de 400 metros de eslora, aunque señaló que no es la primera vez que este tipo de embarcaciones cruzan el canal y poco antes del Ever Given había navegado en sus aguas una más grande, de 240.000 toneladas totales de capacidad.

Rabie tampoco quiso apuntar a ninguna causa concreta como desencadenante del incidente, que se produjo cuando el portacontenedores quedó atravesado en el tramo sur del canal, en el kilómetro 151, durante una tormenta de viento y arena que reducía de manera notable la visibilidad.

“La tormenta de arena no estaba en nuestra mano”, señaló Rabie, quien agregó que puede haber otros motivos como “un fallo técnico o humano, pero no se puede determinar antes de las investigaciones” pertinentes. Tampoco quiso adelantar nada en torno a las posibles multas o indemnizaciones que se impondrán por lo sucedido, pero afirmó que el canal de Suez “no perderá clientes, porque el incidente no fue intencional y no tiene que ver con el propio canal“.

Los remocaldores, esperanzados

La noche del sábado se presentaba como un “buen momento” para intentar mover el portacontenedores. La luna llena y la alta marea invitaban optimismo,según el capitán de uno de los remolcadores que participan en la operación. A bordo del Batal 2 Ever Given, Mohamed Hafez se mostró optimista sobre la posibilidad de poder desencallar el que se encuentra atravesado en el canal y atascado porque su longitud (400 metros) es superior al ancho del paso marítimo. Agregó que durante la jornada lograron mover la proa unos 17 metros en dirección norte, hacia donde navegaba el barco cuando chocó contra una de las orillas y quedó encallado. El ayudante de Hafez, Mohamed Qasem, incluso tenía unas “expectativas de un 90%” sobre la posibilidad de mover el superportacontenedores.